La política de deportar a haitianos en una situación inusual en la República Dominicana ha provocado muchas reacciones. Mientras el gobierno defiende su derecho a gestionar la migración, diversos sectores sociales y organismos internacionales han expresado preocupaciones sobre los derechos humanos y el impacto en las relaciones bilaterales entre ambos países.
A continuación, el periódico Hoy explora diferentes perspectivas sobre este tema. Tema controvertido:
El gobierno, encabezado por el presidente Luis Abinader, afirma que el control migratorio es un asunto de soberanía nacional. Dijo que la inmigración irregular afecta significativamente los recursos nacionales, especialmente en áreas importantes como la salud, la educación y el empleo. Las autoridades citan datos que respaldan su caso.
Sin embargo, organismos nacionales e internacionales han acusado al país de maltratar a los haitianos indocumentados durante el proceso de repatriación, exigiendo mayor respeto a los derechos humanos y la justicia..
Ante estas acusaciones, Radhafil Rodríguez, Asesor Ministerial de la Delegación Permanente de República Dominicana ante la OEA, rechazó las críticas y aportó cifras para contextualizar el peso de la migración haitiana.
Por ejemplo , destacó que el 9,9% de los servicios de salud brindados en 2023 son a ciudadanos haitianos y el 35,9% de los nacimientos en este país ese año pertenecieron a mujeres haitianas. Además, en materia de educación, mencionó que 146 mil menores haitianos forman parte del sistema educativo público, con una inversión de hasta 430 millones de dólares de 2022 a 2023.
Por su parte, el director general de inmigración, luis r. Lee Ballester se reunió con funcionarios de Naciones Unidas para explicar su plan para controlar la migración, garantizar que el país respete los derechos humanos y siga los protocolos internacionales durante el proceso de repatriación.
Reacción de la Iglesia Católica en República Dominicana En un comunicado, la Conferencia Episcopal Dominicana reconoció el derecho de República Dominicana a gestionar su migración, pero enfatiza la importancia de aplicar estas políticas de manera justa y respetando la dignidad humana
. Los obispos instaron a evitar situaciones que puedan conducir a persecución o separación de familias, manteniendo una actitud de solidaridad hacia Haití, país al que República Dominicana ha brindado ayuda durante la crisis.
Postura feminista Organizaciones en el República Dominicana
Más de 50 grupos feministas han denunciado el uso excesivo de fuerza durante las deportaciones, alegando que estas medidas creaban una atmósfera de terror y discriminación, especialmente contra personas racializadas. Afirman que en muchos casos no se respetan los protocolos establecidos, lo que da lugar a violaciones de derechos humanos. Todo el Partido y el Movimiento Caamañista también han condenado las deportaciones, calificándolas de arbitrarias y violatorias de la dignidad humana. Alegan que, en algunos casos, los migrantes detenidos están siendo deportados incluso cuando tienen documentos legales emitidos por el Estado dominicano.
El Primer Ministro de Haití, Garry Conille, condenó las expulsiones a gran escala, calificándolas de “una violación de la dignidad humana.”
Además, la ministra haitiana de Asuntos Exteriores, Dominique Dupuy, también criticó las redadas y el trato a los haitianos indocumentados, que calificó de “brutales” y “deshumanizantes”. ”.
A nivel internacional, varios países y organizaciones se han pronunciado. En una reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos, los embajadores de Estados Unidos, Canadá, Guyana, Colombia y Panamá llamaron a República Dominicana a respetar los derechos de los migrantes y abogaron por el diálogo entre ambos países, según informó Información de la agencia EFE.
El debate sobre la deportación de haitianos en situación ilegal continúa dividiendo a la opinión pública. Si ciertos sectores defienden estas medidas como necesarias para proteger los recursos nacionales, otros advierten del riesgo de abusos y sus consecuencias económicas y sociales.
Del 1 al 6 de octubre, la Dirección General de Migraciones informó que más de Se arrestó a 9.000 extranjeros ilegales.