Washington, D.C. – Día de las elecciones en Washington D.C. Llegó con un despliegue generalizado de medidas de seguridad y una notable oleada de votantes en varios barrios de la capital. La ciudad, epicentro de la actividad política en Estados Unidos, se prepara desde hace semanas para garantizar un proceso ordenado y seguro.
En esta ocasión, cerca de 90 centros de votación fueron instalados en varios barrios del municipio. , desde instituciones educativas hasta edificios comunitarios, con el objetivo de facilitar el acceso y evitar aglomeraciones.
Desde primera hora de la mañana, el flujo de votantes llegó de forma continua y ordenada. Las autoridades locales, en coordinación con agencias federales, han diseñado un sistema de acceso a los centros de votación para minimizar los tiempos de espera y mantener el flujo de personas.
Leer más Washington D.C., con miedo y refugio Además, el distanciamiento social y el uso obligatorio de mascarillas en los centros han proporcionado una sensación de seguridad sanitaria, contribuyendo a promover la participación de un gran número de votantes. En muchos albergues hay más mujeres y también hay una gran participación de jóvenes, tanto hombres como mujeres.
Uno de los aspectos más destacables de este día es la implementación de seguridad en lugares estratégicos como el Casa Blanca, el Capitolio y la Corte Suprema. Estos edificios están vallados con altas puertas de acero y el área circundante es constantemente monitoreada por la policía y la Guardia Nacional.
Para reforzar el perímetro de seguridad, se instalaron barreras de hormigón y las calles vecinas se colocaron bajo control de acceso. Se examinaron documentos y efectos personales de las personas que intentaban acceder a zonas restringidas.
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También se han asignado agentes de seguridad y personal militar en puntos clave, monitoreando las operaciones en tiempo real mediante drones y cámaras de vigilancia en las zonas más transitadas y en los puntos de acceso a los centros de votación.
Un solo incidente ocurrió hasta última hora de la tarde, cuando un individuo con olor a combustible intentó ingresar a áreas restringidas del Capitolio y fue arrestado. Le encontraron una pistola de bengalas y fue trasladado al área de seguridad federal.
La Policía Local desplegó alrededor de 3.000 elementos los días 5 y 6 de noviembre, y la Guardia Nacional hizo lo mismo con sus fuerzas.
