Estudiantes de la Escuela de Cine, Televisión y Fotografía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) han podido despuntar en producciones internacionales y criollas gracias a la pasión por el séptimo arte , pero no por los recursos y condiciones para que puedan desarrollar conocimientos.
Desde hace muchos años y hasta el día de hoy, todavía faltan fondos para comprar equipos, laboratorios combinados filmados y grabados. La colaboración de producción y las salas multimedia permiten un aprendizaje práctico más moderno. Explica el director de la Escuela de Cine, Julio (julio) Melo.
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También sostiene que muchos los estudiantes recurren a equipos para pedir prestado o comprarlos para venderlos porque son demasiado caros y limitan las lecciones prácticas si no son adecuados.
Preocupaciones Otra amenaza son los planes de estudio obsoletos ‘sugirieron, para Melo era cierto que no era necesario seguir formando a los estudiantes de manera general, por lo que anunció que había introducido tres nuevas carreras como parte del trabajo para establecer el diseño y mejorar los programas escolares que lleva a cabo la universidad. examina: cine, realización de documentales y cine de animación, donde la escuela planea crecer para albergar 10 especialidades.
Los derechos cinematográficos deben protegerse; Retirada causaría caos
Para Luis Lora, miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Escuela de Cine de la UASD, la ley cinematográfica es vital para el crecimiento de la industria dominicana y el impacto afectará las oportunidades para los estudiantes y el cine emergente. profesionales. Señala que la falta de incentivos crea otro vacío que puede desmotivar a los jóvenes. Dijo que la ley cinematográfica es necesaria para posicionar al país como un destino atractivo para producciones internacionales, crear empleos, atraer inversión extranjera y fortalecer la identidad cultural.