El deterioro físico y psíquico es cada vez mayor para los familiares de los desaparecidos, que ayer lamentaron que las autoridades no puedan proporcionar información sobre el avance de las investigaciones que en muchos casos permanecen sin respuesta durante meses y años.
Para Altagracia Salomón, quien perdió a su esposo, Jefferson Peña, hace un año, la falta de respuesta impidió que el duelo terminara, pero más aún cuando los casos fueron abandonados sin previo aviso por parte de la policía y fiscales. Esto la llevó a recurrir a plataformas digitales para localizar a sus parejas.
Otros denunciaron que, por complicidad de la organización, estos el responsable asegura que no hay castigo y repite el proceso, como en este caso de Fraila Méndez, quien perdió a su hijo Luis Méndéz hace dos años y nueve meses. Dijo que el caso fue juzgado con los dos imputados y fueron liberados por el juez por “insuficiencia de pruebas”.
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En el mismo auto, Paulina Luciano denunció que su madre Nurys Matos llevaba cinco años desaparecida y que el imputado había sido liberado por su actuación, pese a que se presentaron factores relevantes.
La falta de mano de obra especializada, la falta de equipo forense adecuado y la falta de coordinación también dificultaron la resolución de estos casos, como ocurrió durante la búsqueda de la desaparecida Ana Iris Román, de 54 años.
Su hijo, José Abreu, explica que la interrumpieron porque el perro asignado a la unidad km9 de la policía nacional perdió el olfato en el lugar donde el GPS marcó por última vez el celular de su madre, falló la transmisión del vehículo. al llegar, y ese día empezó a llover por lo que desistieron de la búsqueda y no continuaron, le echaron la culpa.
Manuel Antonio Méndez, junto a su esposa María Rodríguez, dijeron que su hijo, Manuel, había partido en el auto familiar rumbo a la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) desde su domicilio, en la zona de Savica del municipio de Los Alcarrizos, el 16 de septiembre de 2022 y desde entonces se desconoce su paradero.
Pamela García, durante tres años no supo que su hijo Kendry Alcántara había desaparecido tras salir de su casa en Los Montones, en el municipio de Juan de Herrera, provincia de San Juan.
Aseguró que no recibió ayuda de las autoridades para encontrarlo. Asimismo, otras familias con seres queridos desaparecidos le piden al presidente Luis Abinader que se ponga en su lugar y responda con más seriedad a las denuncias.
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