Las percepciones de pobreza en las comunidades fronterizas están en la mayoría de los casos estrechamente asociadas con el rechazo y el miedo a las personas de piel negra como parte integral de la identidad dominicana. Esta es una de las conclusiones del estudio “Pobreza y colonialidad” realizado por Juan Luis Corporán y Jenny Torres, que resalta la negación del pueblo dominicano de sus propios orígenes y cómo la “negritud” es vista como sinónimo de pobreza y mala suerte, en un contexto donde una vida digna se asocia a la piel blanca.
Puedes leer: Policía atribuye asesinato del alcalde Hato a conflicto personal Soy negro y aquí no nos hacen caso, y cuando dije ‘Soy negro’ Porque ser negro es inevitable, son más pobres. La gente le está prestando atención porque entiende que «los blancos» viven mejor», explica Juan Luis Corporán.
El estudio se realizó en comunidades pobres de las provincias fronterizas Pedernales, Independencia, Elías Piña y Dajabón, además de reflejar el desprecio por sí mismos y un fuerte sentimiento de marginación de sus habitantes, también resalta un importante rechazo al pueblo haitiano, asociado a la pobreza y a la cultura africana.
«Estamos gente negra de origen en República Dominicana y por lo tanto no la reconocemos. Tenemos mulatos y todo eso y la gente sigue pensando que somos los españoles contra los africanos que viven del otro lado, los haitianos, y eso no crea convivencia”, explica Corporán.
En el La encuesta también expresó el sentimiento de los haitianos que residen y/o trabajan en la zona fronteriza, quienes expresaron que se sentían abusados por los dominicanos, quienes aprovechaban su extrema pobreza para maltratarlos y pagarles menos por los servicios.
Sin embargo, los haitianos sostienen que su gobierno es responsable de lo anterior y consideran innecesario que el gobierno dominicano permita que su gente resida en la República Dominicana y aquellos que hacen negocios en la frontera. viven en condiciones difíciles, incluso en las relaciones comerciales.