Mi familia tuvo que migrar del barrio San Carlos, decenas de vecinos cuyas viviendas estaban ubicadas en plena prolongación de la Avenida 27 de Febrero borraron del mapa las calles París y Damián. , pero hay recuerdos imborrables de mi infancia y adolescencia.
¿Nuestra generación vive o sufre? un nivel moderado de pobreza nos permite afrontar el hambre con arroz y espaguetis, arepa, chocolate con agua, huevos con pan o despensa, pero también tenemos la suerte de comer bacalao y arenque, que hoy se ha convertido en manjares casi imposibles de comer. tener en la mesa del comedor común. Antes de descubrir que los Reyes Magos no repartían juguetes, los niños de mi barrio escucharon una historia más grande que Trujillo fue ejecutado y todavía recordamos el incidente. represión de los Cascos Blancos contra nuestros hermanos que protestaban por el golpe de Estado contra Juan Bosch.
Sin entender las circunstancias, los muchachos de San Carlos presenciamos cómo estalló abril de 1965, y cuatro días después, también presenciamos la invasión de tanques y vehículos de asalto, aunque terminamos el día debajo de la cama.
Abinader irá a los barrios a comprobar sus necesidades
Las chicas del barrio hacían «pistolas» de madera, gomas de oficina y todo tipo de chinchetas que comprábamos en la ferretería Darío sin las cuales estábamos rindiendo homenaje a la jóvenes de la zona que lucharon “contra los invasores yanquis” en el glorioso perímetro de la capital, Ciudad Nueva.
Los niños jugaban pelota en plena calle, recogiendo gorras refresco, maroteado Gascue y Zona Universitaria, se bañan en Güibia, van al colegio en Profesor Juana, al cine Trianon y tienen pantalones y camisas para uso propio los domingos.
Última Semana Anoche Entré en mi antiguo barrio y lo vi petrificado en el tiempo, rodeado de viejos edificios plurifamiliares, escondiendo un drama social de décadas y así. sistema, como si este asentamiento humano estuviera sufriendo un castigo eterno por sus contribuciones a la lucha por la independencia y la soberanía nacionales.
El presidente Luis Abinader estuvo el viernes en el Club San Carlos para almorzar con miembros de la comunidad, donde anunció que visitará los barrios para examinar las necesidades que solicitan. El Presidente era consciente del absoluto abandono que sufrió la comunidad de mi niñez y adolescencia.
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