En la rueda de prensa diaria, el representante de la Secretaría General, Stéphane Dujarric, fue preguntado sobre las condiciones en las que se realizan estos vuelos desde Estados Unidos y, en particular, sobre las denuncias de Brasil según las cuales las víctimas llegaron a su país en avión. . El presidente colombiano, Gustavo Petro, también rechazó dos vuelos procedentes de Estados Unidos que llegaban a su país el domingo, desatando una compleja crisis. horas -por considerar que se realizaron sin la debida «dignidad» hacia las víctimas.
Esto llevó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a ordenar la imposición de aranceles del 25% a todos los productos colombianos y anunció que en una semana “se incrementarán al 50%”, además de otros derechos de viajes y migración. Sanciones.
Petro respondió con el principio de reciprocidad y ordenó al ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Carlos Reyes, «aumentar en un 25% los aranceles a las importaciones procedentes de Estados Unidos» y otros destinos para productos nacionales.
El domingo por la noche, sin embargo, ambos gobiernos consideraron que la crisis había terminado después de un diálogo entre altos funcionarios de ambos países.
Sin mencionar un país específico por su nombre, Dujarric insistió en que en tales operaciones «hay normas que deben respetarse», una posición que dijo es y sigue siendo «parte integral» de la ONU, sin llegar a criticar a Estados Unidos. También agregó que «los estados tienen el derecho de proteger sus fronteras y establecer sus propias políticas de inmigración».
Deportar inmigrantes fue una de las promesas de campaña más importantes de Donald Trump, y su gobierno ya ha comenzado a implementarla. En los últimos días, los vuelos en varios países, especialmente de América Latina.
El Gobierno colombiano cree que «es posible superar el impasse» provocado por la crisis en las relaciones con Estados Unidos
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