VALLADOLID, 5 de febrero (EUROPA PRESS) – Un juez ha ordenado la detención de un hombre que ha cometido 15 robos en Valladolid desde finales de noviembre y dejó su teléfono móvil cargando en el último establecimiento que asaltó. La detención se produjo en la madrugada del 4 de febrero, cuando el número 091 recibió varias llamadas alertando de un posible robo y posterior pelea. Cuando los oficiales llegaron, vieron a un grupo de personas peleando con un hombre que intentó escapar, aunque le impidieron escapar.
El dueño de la tienda donde ocurrió el ataque dijo a los oficiales que mientras estaba trabajando cerca, notaron una falla en el sistema de videovigilancia que les hizo sospechar que alguien pudo haber accedido a él.
Dos trabajadores fueron a la tienda y encontraron a un hombre adentro que intentaba escapar con una caja fuerte. El hombre sorprendido dejó atrás su botín y trató de escapar por una de las ventanas. La Policía determinó que el mismo había derribado previamente el local para poder entrar.
Los trabajadores persiguieron al hombre por la calle hasta alcanzarlo y lo detuvieron hasta que llegó la Policía Nacional, que lo detuvo por el presunto robo brutal.
La Policía tuvo que confiscar el teléfono móvil que el arrestado había dejado en el bar a petición del mismo. Sin embargo, resultó que estaba cargado y enchufado.
El hombre arrestado fue acusado de dos robos más brutales. Español Uno de ellos se cometió la noche del 2 de febrero en un bar del barrio de Vadillos, donde irrumpió rompiendo un escaparate y sustrajo objetos valorados en más de 550 euros.
El segundo delito se produjo la madrugada del 3 de febrero, cuando irrumpió en un bar del barrio de Rondilla, rompiendo un escaparate y sustrayendo más de 300 euros en efectivo, 150 euros en comida y un teléfono móvil, que tiró a una papelera cercana y que el propietario pudo recuperar.
Desde el 29 de noviembre, el arrestado está acusado de un total de 13 robos con violencia, un hurto y un robo con violencia. El detenido fue puesto esta mañana a disposición de una autoridad judicial, que giró orden de captura en su contra.
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