MIAMI – La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, confirmó que no es responsable de transferir a inmigrantes que no hayan cometido crímenes violentos a la base naval de la Bahía de Guantánamo. Esto garantiza que las instalaciones cumplan con la normativa. “La seguridad de Estados Unidos”, dijo a CNN.
A principios de este mes, la administración del presidente Donald Trump comenzó a transferir inmigrantes ilegales a la base naval de la Bahía de Guantánamo en Cuba como parte de una política de inmigración más estricta. 4 de abril desde El Paso, Texas, a Guantánamo en un avión militar. Guantánamo está destinado a albergar a inmigrantes deportados. Cuando el Presidente firmó la Ley Laken-Riley, defendió la medida afirmando que tenía “30.000 camas en Guantánamo para retener a los criminales ilegales más peligrosos que amenazan al pueblo estadounidense”. Sobre quién debería ser enviado a Guantánamo, Trump dijo: «Algunos de ellos son tan malos que ni siquiera confiamos en los países que pueden retenerlos. «No queremos que regresen, por eso los vamos a enviar a Guantánamo». Aunque las autoridades estadounidenses han asegurado que la estancia en la base naval de Guantánamo es temporal, no han facilitado ninguna información sobre el tiempo que permanecerán allí los detenidos. Según el Departamento de Defensa de Estados Unidos, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) tiene a los individuos en la base en espera de una decisión sobre si los deporta a Venezuela o los envía a otro destino. Esta es la primera vez que el centro de detención se utiliza para detener a personas sospechosas de tener vínculos con delitos terroristas.
La medida es parte de un esfuerzo más amplio de la administración Trump para fortalecer las medidas para combatir la inmigración ilegal. Esto incluye la ampliación de los campos de internamiento y la aplicación de acuerdos bilaterales para facilitar la repatriación de ciudadanos sin documentos de residencia.
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