El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, calificó el tiroteo del martes en un centro de educación para adultos en Örebro, 200 kilómetros al oeste de Estocolmo, en el que murieron al menos una docena de personas, como el «peor» en la historia del país escandinavo.
“Hoy hemos sido testigos de una violencia brutal y mortal contra personas completamente inocentes. “Este es el peor tiroteo masivo en la historia de Suecia”, dijo Kristersson en una conferencia de prensa. Kristersson dijo que lo ocurrido era «difícil de aceptar» y expresó su «tristeza sin límites» porque «sucedió algo que no debería haber sucedido».
La policía sueca aún no ha publicado el número exacto de muertos (incluido el presunto tirador) y heridos y está trabajando para identificar los cuerpos. “En este momento estamos seguros de que no habrá más ataques. «Las escuelas donde los profesores y los estudiantes buscaron refugio ya han sido evacuadas», dijo el jefe de policía de Örebro, Roberto Eid Forrest, en una conferencia de prensa anterior. La policía no conocía al tirador. Ella asume que él actuó solo y no pertenecía a ninguna banda criminal. Inicialmente descartó cualquier vínculo con organizaciones terroristas.
“Aún nos faltan respuestas. «Tampoco puedo dárselo», dijo Kristersson, instando a la gente a no especular sobre los motivos del tirador. Expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias y dijo: «Compartimos vuestro dolor». La líder de la oposición y socialdemócrata Magdalena Andersson habló de un «día de dolor» para Örebro y toda Suecia. “Esta tarde expresamos nuestras condolencias a los familiares de las víctimas. “Pensamos también en los heridos y en sus familias”, afirmó el Rey Carlos XVI. Gustaf en un comunicado.
La policía sueca recibió información sobre el tiroteo poco después de las 12:30 hora local (11:30 GMT). El Hospital de Örebro ha abierto su sala de urgencias y su unidad de cuidados intensivos para tratar a los heridos, informó la emisora pública Radio Suecia.
El campus de Risbergska es un centro de educación para adultos y, según Lena Warenmark, una de las profesoras que contó a la emisora pública SVT, en el momento del tiroteo había menos estudiantes de lo habitual porque muchos se habían ido a casa después de terminar sus exámenes.
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