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Es innegable que el dominicano Rafael Devers, de Boston, está teniendo el peor comienzo de temporada de su carrera. Por este motivo, es el bateador de las Grandes Ligas que más está sufriendo “ataques” de los lanzadores con una gran cantidad de bolas rápidas en cada turno al bate.
El sábado, en el primer juego de una doble tanda entre Boston y Cleveland, el abridor Ben Lively se unió a la tendencia de desafiar a Devers con bolas rápidas y no le fue bien.
En el inicio del tercer episodio del primer juego, Devers vio pasar el primer lanzamiento, una recta cortada en la parte superior. El siguiente lanzamiento de Lively también fue una bola rápida que Devers atacó, enviándola por encima de la valla del jardín derecho del Progressive Field, de Cleveland, con un recorrido de 381 pies, a una velocidad de salida de 110.9 millas por hora.
Ese jonrón de Devers significó un avance positivo en comparación con el primer juego de la doble cartelera, ya que rompió una mala racha de 16-0.
Devers solo había conectado imparables en cuatro de sus últimos 45 turnos al bate (.091) al llegar a ese turno.
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El cuadrangular fue su batazo más fuerte de la temporada. Fue un batazo de 381 pies y 110.9 mph al jardín derecho que empató el juego 4-4 en la tercera entrada. El dirigente Alex Cora lo calificó como “una gran señal”.
Boston tuvo muchas oportunidades de empatar el primer juego, pero se fue de 11-1 con corredores en posición de anotar y dejó a nueve hombres en base. Los dos primeros bateadores se embasaron en el noveno inning, pero Boston no lo supo aprovechar.
“No fuimos efectivos”, dijo Cora. “Tuvimos corredores en base. Tuvimos buenos turnos al bate, pero no concretamos, así que simplemente tenemos que mejorar”.
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