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Es evidente que un jugador no es el equipo entero. Sin embargo, para los Azulejos de Toronto, la marcha de Juan Soto de la Liga Americana es un alivio genuino. Y no es una exageración. Soto, que en 2024 vistió el uniforme de los Yankees de Nueva York, forzaba a los Azulejos a enfrentarlo al menos 18 veces por temporada, al compartir división. Pero ahora, con su llegada a los Mets de Nueva York, solo se cruzarán en tres ocasiones al año. Una diferencia más que significativa. El dominicano Carlos Febles, coach de tercera base de Toronto, no esconde su tranquilidad al respecto. «Claro que es un alivio no tener que enfrentarse a Soto. Es un gran pelotero. Todo el mundo sabe de lo que es capaz, cómo estudia a los lanzadores. No tener que verlo siempre es una ventaja para nosotros», dijo el criollo al Listín Diario. Aún así, Febles tiene claro que la División Este de la Liga Americana no se ha debilitado con la salida de Soto. Todo lo contrario. «No podemos pensar que porque Soto no está en los Yankees, ese equipo ya no es fuerte. Ese conjunto luce quizás mejor este año. Boston también se reforzó mucho, Baltimore siempre está en la pelea, y Tampa, todos saben que juega buen béisbol. Esta división quizás es más complicada que el año pasado», advirtió. El también dominicano Vladimir Guerrero Jr. vive su última temporada bajo contrato con los Azulejos, y cada día surgen rumores sobre una posible extensión. A pesar de esto, Febles asegura que su concentración no se ha desviado. «Vladimir está tranquilo. Es un muchacho inteligente, y obviamente nosotros queremos que se quede con nosotros el mayor tiempo posible. Pero él tiene la mente puesta en jugar béisbol, que es lo importante», expresó Febles, restando importancia a su lento inicio ofensivo. En la temporada pasada de la Liga Dominicana de Béisbol, Febles fue mánager interino de los Toros del Este tras la salida de José Offerman. Desde entonces, su nombre ha sido asociado constantemente a puestos de mando en la pelota invernal. El propio Febles admite que le gustaría dirigir, pero que sus compromisos en Grandes Ligas le dificultan estar disponible desde el principio. «No es un secreto para nadie que para ser mánager de LIDOM hay que tener tiempo, y estar por lo menos tres semanas antes de que empiece la temporada, para que los muchachos te conozcan y eso. Y yo quizás no tenga esa posibilidad por el tema de que trabajo aquí en MLB. Pero claro, mi deseo es dirigir en LIDOM y seguir trabajando fuerte. «Cada persona que está ligada al béisbol dominicano quiere dirigir y quiere ganar allá», afirmó. Aunque su carrera como coach en Grandes Ligas ha estado principalmente ligada a la tercera base, Carlos Febles no esconde que su ambición es seguir creciendo en el más alto nivel del béisbol. «Uno siempre quiere seguir avanzando. Ya he aprendido mucho aquí, y sí, ¿por qué no?, también me gustaría tener la oportunidad de dirigir en MLB algún día, si Dios lo tiene previsto para mí», concluyó.
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