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MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) –
Jared Isaacman, el propuesto por Trump para la NASA, asegura que la agencia puede compaginar el proyecto marciano -impulsado por Elon Musk y el propio Trump- y el programa Artemis para volver a la Luna.
“No hay que tomar una decisión excluyente de Luna contra Marte, o que la Luna tenga que ser primero o Marte”, declaró Isaacman en una concurrida audiencia ante el Comité de Comercio del Senado de Estados Unidos en Washington, informa Bloomberg.
Al ser interrogado sobre cómo la NASA lograría ambas cosas con su limitado presupuesto, Isaacman argumentó que la agencia tiene historial de hacer lo “casi imposible”, aunque fue parco en detalles sobre cómo podrían cambiar los programas.
Este empresario multimillonario, director ejecutivo de Shift4 Payments Inc., invirtió su propio dinero en SpaceX para crear un programa de vuelos espaciales tripulados llamado Polaris y realizó la primera caminata espacial privada del mundo con un traje diseñado por SpaceX. Sin embargo, Isaacman afirma que rescindirá todos sus acuerdos financieros con la compañía si se confirma su nombramiento, según una declaración de ética.
Su cercanía a SpaceX, Musk y la posible parcialidad hacia la compañía se trataron repetidas veces durante la audiencia. En respuesta a una pregunta del demócrata de Michigan Gary Peters, Isaacman afirmó no haber estado en contacto con Musk sobre sus planes para dirigir la agencia.
“Senador, quiero ser absolutamente claro: mi lealtad es con esta nación, la agencia espacial y su misión transformadora”, declaró.
Más tarde, Isaacman no respondió a la pregunta del demócrata de Massachusetts, Ed Markey, sobre si Musk estaba presente cuando Trump le ofreció el puesto de administrador de la NASA. “Me estaba entrevistando el presidente de Estados Unidos”, repitió sin confirmar ni negar la presencia de Musk.
En los últimos meses, Musk ha expresado opiniones audaces sobre la política espacial, calificando la Luna de “distracción” y argumentando que la Estación Espacial Internacional debería ser retirada de órbita años antes de lo previsto.
En la audiencia, Isaacman criticó algunos aspectos del historial de la NASA, asegurando que muchos de sus programas, desde naves espaciales hasta telescopios, están sobrepasando el presupuesto y con años de retraso. “Se han gastado más de 100.000 millones de dólares sin obtener los resultados previstos”, declaró Isaacman.
También hizo referencia a cómo su trayectoria poco convencional destaca entre los administradores anteriores de la agencia. Isaacman es una elección inusual de Trump, ya que hizo donaciones recientes a los demócratas.
“No soy un candidato habitual para este cargo. He sido relativamente apolítico; no soy científico y nunca trabajé en la NASA. No creo que estas sean debilidades”, dijo Isaacman. “De hecho, creo que el presidente Trump las consideró fortalezas”.
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