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Paige Bueckers, una de las favoritas para ser la número uno en el draft de la WNBA, y UConn vencieron este domingo por 82-59 a South Carolina, las actuales campeonas, y lograron su duodécimo título femenino de la NCAA.
UConn, que llegaba a la final como la segunda cabeza de serie, volvió a ser la reina del baloncesto universitario femenino tras nueve años.
El entrenador Geno Auriemma celebró su duodécimo título universitario, consolidándose como el entrenador más exitoso en este nivel del baloncesto estadounidense.
Fue una revancha para UConn, que perdió contra South Carolina la final de la NCAA en 2022. Bueckers formó parte del equipo que estuvo a punto de ganar el título en 2022 y también del que cayó ante las Iowa Hawkeyes de Caitlin Clark en la Final 4 del año pasado.
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Este título tiene un significado especial para Bueckers, que jugaba su último año en el baloncesto universitario y que venía de recuperarse de una grave lesión que la mantuvo fuera de las canchas en la temporada 2022-23. Deja el baloncesto universitario con el récord de puntos de su equipo en un torneo de la NCAA, con 477.
Bueckers anotó 17 puntos, seis rebotes y tres asistencias en la final contra South Carolina, en un partido donde Sarah Strong tuvo un doble-doble de 24 puntos y quince rebotes y Azzi Fudd aportó 24 puntos. South Carolina tuvo una final apagada y sus máximas anotadoras fueron Tessa Johnson y Joyce Edwards, con diez puntos cada una.
La final masculina se jugará este lunes entre Florida y Houston.
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