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ESTADOS UNIDOS.- — Donald Trump, de 78 años, fue declarado con «excelente salud» luego de someterse a un chequeo físico de rutina, informó este domingo el médico de la Casa Blanca, el capitán de la Marina Sean Barbella.
El informe representa la evaluación médica más completa desde su retorno a la presidencia de Estados Unidos en enero, convirtiéndose en el mandatario de mayor edad al comenzar un nuevo periodo presidencial.
«El presidente Trump goza de una salud cognitiva y física excelente, y está totalmente capacitado para desempeñar las funciones de comandante en jefe y jefe de Estado», indicó Barbella en su reporte.
Barbella detalló que Trump padece de colesterol alto, pero se encuentra «bien controlado» mediante dos medicamentos: rosuvastatina y ezetimiba, conocidos comercialmente como Crestor y Zetia.
Asimismo, utiliza una crema de mometasona para controlar la rosácea, una afección cutánea, y toma aspirina de forma preventiva.
El médico también confirmó que Trump presenta una cicatriz en la oreja derecha, resultado del intento de asesinato que sufrió en julio de 2024 durante un mitin en Butler, Pensilvania. A pesar del disparo, su audición es normal y no hay secuelas físicas.
El equipo médico del entonces candidato ya había informado en su momento que las heridas fueron superficiales.
En ese entonces, el congresista republicano y exmédico presidencial Ronny Jackson revisó los registros clínicos y concluyó que Trump estaba «excelentemente bien». El propio mandatario ha declarado que la lesión ya sanó por completo y no le ha dejado ningún efecto duradero.
Durante la evaluación, Trump también se sometió voluntariamente a una prueba cognitiva conocida como Montreal Cognitive Assessment, en la que obtuvo la puntuación máxima: 30 de 30.
«Quería ser un poco diferente a mi predecesor», comentó Trump en referencia a Joe Biden, de 82 años, cuya salud mental fue cuestionada tras un desempeño errático en un debate que eventualmente lo apartó de la contienda electoral.
El informe de Barbella hace un contraste directo con la situación de Biden, a quien sus médicos calificaron como «apto para servir», pero cuya condición fue cuestionada por diversas publicaciones en los últimos meses de su mandato.
El reporte actual añade que Trump recibió todas las vacunas recomendadas, a pesar de que en el pasado expresó dudas sobre su seguridad, respaldando posturas difundidas por su entonces secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr.
«Creo que fue bien. Hice cada prueba que se puedan imaginar, fue un examen físico largo… Creo que salí bien».
La doctora Céline Gounder, colaboradora médica de CBS News, advirtió previo al examen físico sobre la naturaleza de este tipo de revisiones en figuras de alto perfil:
«Un examen físico presidencial no es un examen físico típico. Es más bien un evento de relaciones públicas médicas cuidadosamente seleccionado, cuyo objetivo principal es asegurar al público que el presidente puede desempeñar sus funciones», explicó.
El último chequeo médico de Trump se realizó en septiembre de 2023, durante su campaña. En noviembre publicó una carta de su médico osteópata, Bruce Aronwald, quien también aseguraba que su estado general era «excelente», con parámetros normales y una capacidad cognitiva «excepcional».
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