Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
Washington.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio la bienvenida este lunes en la Casa Blanca a los actuales campeones del Super Bowl de la NFL, los Philadelphia Eagles, que presentaron notables ausencias, como la de su ‘quarterback’, Jalen Hurts.
“A lo largo de su asombrosa temporada, este increíble grupo de guerreros (porque eso es lo que son, auténticos guerreros modernos) inspiró al mundo con su espíritu impresionante, su destreza atlética y su trabajo en equipo excepcional”, declaró Trump.
“Y lograron que los seguidores de los Eagles en todo el mundo se sintieran verdaderamente muy orgullosos”, agregó.
Trump asistió al partido, convirtiéndose en el primer presidente estadounidense en funciones en asistir a un Super Bowl.
En la recepción de hoy en la Casa Blanca, los Eagles regalaron a Trump un casco del equipo y una camiseta con el ’47’ a la espalda, por su número como presidente en la historia de Estados Unidos.
Trump dedicó buena parte del acto a alabar a la estrella de los Eagles, Saquon Barkley, a quien este domingo invitó a jugar al golf en su campo de Nueva Jersey y con quien luego viajó a Washington a bordo del Air Force One.
En 2018, los Eagles, también ganadores ese año del Super Bowl, vieron cómo Trump cancelaba la invitación que les había extendido después de que se supiera que el equipo pretendía enviar a un número reducido de jugadores.
La entonces portavoz de la Casa Blanca y actual gobernadora de Arkansas, Sarah Sanders, acusó a los Eagles de buscar una acción mediática con trasfondo político.
Agregar Comentario