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Nashville, Tennessee, EE. UU.- Más de 100 individuos fueron arrestados por agentes federales de inmigración en una operación conjunta con la Patrulla de Carreteras de Tennessee, lo que causó inquietud e incertidumbre entre la comunidad inmigrante de Nashville.
“Ninguno de nosotros ha visto algo semejante antes”, comentó el viernes Lisa Sherman Luna, directora ejecutiva de la Coalición de Derechos de Inmigrantes y Refugiados de Tennessee.
La operación, llevada a cabo con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), sirve como recordatorio de cómo las jurisdicciones locales y estatales son cruciales para los planes de deportaciones masivas del presidente Donald Trump. La semana pasada, agentes de Florida presumieron de una operación conjunta con el ICE en la que se realizaron 1.120 arrestos relacionados con inmigración.
La Patrulla de Carreteras comunicó el viernes que efectuó 588 controles de tráfico en la operación conjunta con el ICE, y que detuvo a 103 personas bajo investigación por violaciones de las leyes de inmigración.
Las paradas “condujeron a la incautación de drogas y armas ilegales, retirando de las calles a elementos peligrosos y haciendo que Tennessee sea más seguro”, afirmó la Patrulla de Carreteras. Una persona era buscada por un asesinato en El Salvador.
El gobernador de Tennessee, Bill Lee, recientemente sancionó una ley para crear una división de aplicación de las leyes de inmigración en el Departamento de Protección y Seguridad Nacional del estado, del que forma parte la Patrulla de Carreteras. Es uno de los funcionarios republicanos comprometidos a emplear recursos estatales para llevar a cabo los planes de Trump.
Mientras tanto, las autoridades de la ciudad en el bastión demócrata de Nashville rechazaron la participación y han criticado los arrestos. El director legal de Nashville, Wally Dietz, indicó que la operación estatal-federal, que comenzó el 3 de mayo, tomó por sorpresa a todos los miembros del gobierno de la ciudad.
Respondiendo a las preocupaciones sobre la presencia de la policía de Nashville fuera de una oficina del ICE, Dietz afirmó el miércoles que la ciudad “recibe de manera habitual solicitudes de patrullas adicionales por diversas razones y responde en la medida en que los recursos lo permiten”. Dijo que desconocía quién había sido arrestado y que, al solicitar más información a la Patrulla de Carreteras, le dijeron que presentara una solicitud de registros públicos.
La Patrulla de Carreteras especificó que los controles de tráfico se basan únicamente en el comportamiento del conductor. “No entramos en vecindarios ni detenemos vehículos basándonos en quién es una persona, sino en lo que hacen al volante”, aseguró.
No obstante, los defensores de los derechos de los inmigrantes argumentan que las patrullas se han centrado en áreas de la ciudad donde la mayoría de los residentes son personas de color.
“Todos los indicios sugieren que se trata de una acción policial con tintes raciales destinada a aterrorizar a la comunidad inmigrante y refugiada”, aseveró Sherman Luna. “Hemos escuchado que la patrulla de carreteras detiene a individuos por cosas como una luz trasera dañada o ventanas polarizadas”.
Sherman Luna cree que algunos de los detenidos podrían quedarse en el país si pudieran obtener representación legal adecuada en una audiencia de inmigración. En cambio, ha oído que las personas acceden a ser deportadas por temor a pasar meses o años detenidas en instalaciones de inmigración.
Cerca del 9% de la población del área metropolitana de Nashville, de aproximadamente 2 millones de personas, son inmigrantes, y muchos provienen de México y Honduras, según el análisis de datos del censo del Instituto de Políticas de Migración. La ciudad también tiene una considerable población kurda que convive con refugiados de Sudán, Myanmar y otros países.
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