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El encuentro entre las Indiana Fever de Caitlin Clark y las Chicago Sky de Angel Reese promedió 2.7 millones de televidentes, convirtiéndose en el partido más visto de la WNBA en ESPN. Clark logró un triple-doble, mientras que Reese anotó 12 puntos y capturó 17 rebotes en la amplia derrota de Chicago.
Ambas jugadoras también protagonizaron un momento en la cancha cuando Clark cometió una falta dura sobre Reese durante un intento de bandeja, que derivó en flagrante 1 tras la revisión arbitral. Ambas, posteriormente, afirmaron que solo se trató de una jugada de baloncesto.
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Un día después del partido, la liga anunció que investigaba comentarios racistas dirigidos a Reese por parte de los aficionados. Una fuente cercana a la situación confirmó los detalles a The Associated Press el domingo. La persona habló bajo condición de anonimato, ya que la liga no había revelado públicamente al objeto de las burlas ni a los responsables de las acusaciones.
Indiana declaró que cooperaría con la liga en todo lo posible.
“Le dije al equipo que, obviamente, colaboraremos plenamente con la investigación”, dijo el lunes la entrenadora de las Fever, Stephanie White. “Pero eso no tiene lugar en nuestra liga, ni en casa ni fuera. No importa. Queremos animar a nuestras jugadoras y personal a que lo denuncien en tiempo real si escuchan, ven o algo similar”.
Ambos equipos volverán a enfrentarse el 7 de junio en Chicago.
No solo el partido Chicago-Indiana captó una gran audiencia. El primer partido del sábado entre Las Vegas y Nueva York promedió 1.3 millones de espectadores. La actual MVP, A’ja Wilson, tuvo una actuación destacada en la derrota. La subcampeona de la temporada pasada también tuvo un gran primer fin de semana, con Napheesa Collier liderando a Minnesota a dos victorias.
Si bien se esperaba que Indiana, Chicago, Las Vegas, Nueva York y Minnesota acapararan la atención de la WNBA esta temporada, no se esperaba mucho de Washington, con un nuevo entrenador, una nueva gerente general y un gran número de jugadoras nuevas, lideradas por las novatas Sonia Citron y Kiki Iriafen.
Las Mystics ganaron sus dos primeros partidos y ahora se preparan para una gira de tres partidos por la costa oeste, en Golden State, Las Vegas y Phoenix.
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