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Novak Djokovic siguió haciendo historia en el tenis al ganar el sábado su título número 100 en individuales, y el primero en una ciudad muy especial para su familia.
Djokovic logró finalmente su centenario tras remontar para vencer a Hubert Hurkacz por 5-7, 7-6 (2), 7-6 (2) en más de tres horas, en la final del Abierto de Ginebra. Había perdido sus dos finales previas desde su título número 99, hace nueve meses, en los Juegos Olímpicos de París en Roland-Garros.
Se une a las leyendas del tenis, Jimmy Connors, quien posee el récord de 109 títulos, y Roger Federer con 103, como los únicos hombres con un centenar de victorias en torneos en la era abierta.
El partido número 100 se celebró después de un encuentro típicamente arduo y laborioso, dos días después de cumplir 38 años, y rodeado de su familia, en la ciudad suiza donde residen algunos parientes.
Su esposa e hijos se unieron a él en Ginebra para celebrar su cumpleaños tras faltar a la escuela, bromeó Djokovic, revelando también otra razón por la que consiguió una entrada de último momento como invitado especial para el último calentamiento en arcilla previo al Abierto de Francia.
La ciudad a orillas del lago es el hogar de una tía y un tío muy queridos, además de primos, incluido uno que recientemente dio a luz a un bebé, al cual los Djokovic deseaban conocer.
El tres veces campeón de Roland Garros regresa a París con la intención de añadir más títulos a sus 24 individuales de Grand Slam. El lunes disputará la primera ronda contra el estadounidense Mackenzie McDonald.
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