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WEST PALM BEACH, Florida, EE. UU. (AP) — El presidente estadounidense Donald Trump se muestra prudente al abordar sus obligaciones de defender los derechos al debido proceso estipulados en la Constitución y manifestó en una nueva entrevista que desconoce si los ciudadanos estadounidenses y los no ciudadanos ameritan dicha garantía.
También aseguró que no considera necesaria la intervención militar para convertir a Canadá en el “estado 51” y restó importancia a la posibilidad de buscar un tercer mandato en la Casa Blanca.
Los comentarios en una entrevista extensa y por momentos confrontacional con el programa “Meet the Press” de la cadena NBC ocurrieron mientras los esfuerzos del presidente republicano para implementar rápidamente su programa enfrentan vientos en contra más fuertes con los estadounidenses, cuando su segundo período administrativo sobrepasó la marca de los 100 días, según una encuesta reciente del Centro NORC para la Investigación de Asuntos Públicos y The Associated Press.
Sin embargo, Trump dejó claro que no se está alejando de una lista de tareas que insiste en que el electorado estadounidense apoyó ampliamente cuando fue electo en noviembre.
Estos son algunos de los puntos clave de la entrevista con Kristen Welker de NBC, que fue grabada el viernes en su propiedad de Mar-a-Lago en Florida y transmitida el domingo:
Los críticos de izquierda han intentado argumentar que Trump está socavando el debido proceso en Estados Unidos. En particular, mencionan el caso de Kilmar Ábrego García, un salvadoreño que residía en Maryland y fue deportado por error a El Salvador y encarcelado sin comunicación.
Trump alega que Ábrego García es parte de una violenta pandilla transnacional. El presidente republicano ha buscado convertir la deportación en un caso de prueba para su campaña contra la inmigración ilegal a pesar de una orden de la Corte Suprema que indica que la administración debe trabajar para devolver a Abrego García a Estados Unidos.
Cuestionado en la entrevista sobre si tanto los ciudadanos estadounidenses como los no ciudadanos merecen el debido proceso, como se establece en la 5ta Enmienda de la Constitución, Trump no fue concluyente.
“No lo sé. No soy, no soy abogado. No lo sé”, dijo Trump cuando Welker lo presionó.
La 5ta Enmienda proporciona “debido proceso legal”, lo que implica que una persona tiene ciertos derechos cuando es procesada por un delito. Además, la Enmienda 14 establece que ningún estado puede “negar a ninguna persona dentro de su jurisdicción la igual protección de las leyes”.
Trump indicó que cuenta con “abogados brillantes… y obviamente van a seguir lo que dictaminó la Corte Suprema”.
Señaló que estaba presionando para deportar a “algunas de las personas más malas y peligrosas del mundo”, pero que los tribunales se interponen en su camino.
“Fui elegido para sacarlos de aquí, y los tribunales me están impidiendo hacerlo”, declaró Trump.
El presidente ha amenazado reiteradamente con convertir a Canadá en el “estado 51”.
Antes de su reunión en la Casa Blanca el martes con el recién elegido primer ministro canadiense Mark Carney, Trump no se aparta de la retórica que ha enfurecido a los canadienses.
No obstante, Trump comentó a NBC que era “altamente improbable” que Estados Unidos requiriera usar la fuerza militar para convertir a Canadá en otro estado de la Unión Americana.
Ofreció menos certeza sobre si sus reiterados llamados para que Estados Unidos tome el control de Groenlandia de Dinamarca, aliada de la OTAN, pueden lograrse sin acción militar.
“Algo podría ocurrir con Groenlandia”, afirmó Trump. “Seré sincero, necesitamos eso para la seguridad nacional e internacional… No lo veo con Canadá. Simplemente no lo veo, tengo que ser honesto contigo”.
Trump puntualizó que la economía de Estados Unidos está en un “periodo de transición”, pero confía en que funcione “fantásticamente” a pesar de la agitación económica provocada por sus aranceles.
Ofreció una respuesta enérgica cuando Welker mencionó que algunos analistas de Wall Street ahora dicen que las posibilidades de una recesión están aumentando.
“Bueno, ya sabes, dices que algunas personas en Wall Street dicen”, acotó Trump. “Bueno, te diré otra cosa, algunas personas en Wall Street dicen que vamos a tener la mejor economía de la historia”.
También desvió la responsabilidad por la caída del 0.3% en la economía de Estados Unidos en el primer trimestre. Aclaró que no era responsable de ello.
“Creo que las partes buenas son la economía de Trump y las partes malas son la economía de Biden porque ha hecho un trabajo pésimo”, refiriéndose a su antecesor demócrata, Joe Biden.
Trump reafirmó sus comentarios recientes en una reunión del gabinete de que los niños podrían tener dos muñecas en lugar de 30, negando que sea un reconocimiento de que sus aranceles provocarán escasez de suministros.
“Sólo digo que no es necesario tener 30 muñecas. Pueden tener tres. No necesitan tener 250 lápices. Pueden tener cinco”.
El presidente ha sugerido en repetidas ocasiones que podría buscar un tercer mandato en la Casa Blanca, aunque la Enmienda 22 de la Constitución establece que: “Ninguna persona será elegida para el cargo de presidente más de dos veces”.
Trump comentó durante la entrevista que hay un considerable apoyo para que se postule para un tercer mandato.
“Pero esto no es algo que esté buscando hacer”, afirmó Trump. “Estoy buscando tener cuatro grandes años y entregárselos a alguien, idealmente un gran republicano, un gran republicano para que continúe”.
Los anteriores comentarios de Trump sobre un tercer mandato en ocasiones parecen enfocados en provocar indignación en la izquierda política. La Organización Trump incluso está vendiendo gorras rojas con las palabras “Trump 2028”.
Sin embargo, en ciertos momentos, ha insinuado que estaba considerando seriamente un tercer mandato. En una entrevista telefónica a finales de marzo con NBC, Trump dijo: “No estoy bromeando. Hay métodos por los cuales podrías hacerlo”.
Trump declaró en la entrevista que el vicepresidente JD Vance está haciendo un “trabajo fantástico” y es “brillante”. El secretario de Estado Marco Rubio, a quien Trump la semana pasada encargó simultáneamente servir como asesor de seguridad nacional en funciones, es “genial”, dijo el presidente.
Pero Trump señaló que es “demasiado pronto” para empezar a hablar sobre su posible sucesor.
Está convencido de que su movimiento “Hagamos grande a Estados Unidos otra vez” florecerá más allá de su tiempo en la Casa Blanca.
“Miras a Marco, miras a JD Vance, que es fantástico”, dijo Trump. “Miras a… podría nombrar a 10, 15, 20 personas ahora mismo sólo estando aquí sentado. No, creo que tenemos un partido tremendo. ¿Y sabes a quién no puedo nombrar? No puedo nombrar a un solo demócrata”.