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Mantenerse hidratado es vital para el correcto funcionamiento del organismo. Es necesario ingerir diferentes líquidos para reponer el agua que perdemos a diario. La hidratación proporciona energía, traslada nutrientes, evita el estreñimiento, elimina toxinas del cuerpo, mejora la salud de la piel y ofrece múltiples beneficios.
La Cruz Roja indica que el agua es uno de los seis nutrientes esenciales para la vida, junto a los carbohidratos, las grasas, las proteínas, las vitaminas y los minerales. Se recomienda consumir al menos 2 litros o entre 6 y 8 vasos de agua al día para una hidratación óptima.
Sin duda, el agua es la bebida predilecta para satisfacer esta necesidad. Pero si te cansas de tomarla sola, te mostramos siete alternativas refrescantes y saludables para mantenerte hidratado, sin recurrir a bebidas azucaradas:
Incorpora rodajas de frutas como limón, naranja, fresa o pepino. No solo tendrá mejor sabor, sino que será más atractiva visualmente.
Verduras de hoja verde, sandía, pepino, melón, tomate, entre muchas otras, tienen un alto contenido de agua que contribuye a la hidratación del cuerpo.
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Es una opción refrescante y ligera. Puedes prepararlo en casa con té verde o negro, y añadirle unas gotas de limón.
Además de proporcionar una buena cantidad de líquidos, contiene calcio, vitamina D y proteínas. Ideal para niños y adultos mayores.
Pon tus frutas favoritas en una jarra con agua y refrigéralas durante unas horas. Obtendrás una bebida fría, deliciosa y sin azúcares agregados.
Preparar jugos caseros con frutas frescas te permite controlar los ingredientes y mantener el enfoque en lo natural.
Según Eurofarma, tiene un contenido de agua del 95 %, incluso más que el jugo de cualquier fruta. Aporta potasio, es baja en calorías y no contiene azúcares añadidos. Eso sí: revisa siempre la etiqueta para asegurar que sea 100 % natural.
