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EE.UU. ejerce presión, pero México no reacciona: la salud se privatiza sin decirlo. Audio relacionado Su navegador no soporta la reproducción de audio por HTML 5 Colaboración Eduardo Torreblanca.
La crisis del sistema de salud en México no solo se ha intensificado en los últimos años, sino que ha desvelado lo que muchos consideran una privatización encubierta del servicio público. A pesar de las promesas de erradicar el desabastecimiento de medicamentos y asegurar el acceso universal, la verdad es que hoy las familias mexicanas deben pagar cada vez más por consultas y medicinas.
En entrevista para MVS Noticias con Manuel López San Martín, el analista económico Eduardo Torreblanca fue tajante: “Al menos en el sector salud, el expresidente se la pasó engañando al país. Nos estuvo mintiendo todo el tiempo, prometiendo cosas que nunca cumplió”, declaró, refiriéndose directamente a las promesas incumplidas del presidente saliente.
El sexenio de las promesas rotas y la salud abandonada
Uno de los temas más alarmantes que señaló Torreblanca fue la existencia de un subejercicio de 45 mil millones de pesos en el sector salud durante el primer trimestre de 2024, algo que calificó de inaceptable en un país con tantas carencias médicas. “Es inconcebible que se tolere un subejercicio en el sector salud, sobre todo encabezado por una científica mexicana. En otras áreas podría ser comprensible, pero aquí es improcedente”, enfatizó.
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A esta crítica situación se suma el crecimiento desmedido de los consultorios privados adosados a farmacias, que ya superan en número a los centros de salud públicos: 18 mil consultorios frente a apenas 12 mil centros oficiales. Esta realidad, señala Torreblanca, ha transformado el acceso a la salud en una cuestión de capacidad adquisitiva.
¿Privatización disfrazada? La pregunta incómoda
“Hoy la gente tiene que gastar para conseguir un medicamento cuando lo necesita. Si tienen suerte, lo van a encontrar en el sector salud pública, pero muchos, muchísimos, no lo están pudiendo localizar ahí”, denunció el analista. De hecho, cada día las familias mexicanas desembolsan más de 16 millones de pesos únicamente en consultas privadas, sin contar medicamentos, lo que al año suma más de 6 mil millones de pesos.
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En este contexto, Torreblanca planteó una pregunta provocadora: “¿No se estará consumando ya, en la práctica, una privatización del sector salud?”. La reducción del 46% en las consultas públicas durante el sexenio anterior contrasta con el aumento exponencial de los servicios privados, una tendencia que el gobierno actual no ha revertido.
Y aunque el tema central fue la crisis interna, Torreblanca también subrayó que la presión internacional — incluida la de Estados Unidos a través de organismos multilaterales y acuerdos comerciales — exige a México garantizar servicios básicos como salud, algo que el país sigue sin cumplir cabalmente.
Mientras tanto, la informalidad económica sigue dominando en la mayor parte del país. Torreblanca cerró con una cifra impactante: “En el 69% de los municipios la informalidad económica supera el 70%”. En este panorama, la salud se convierte no solo en una necesidad, sino en un lujo que cada vez menos pueden costear.
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