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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles una proclama que vetará el ingreso al país norteamericano de ciudadanos de una docena de países, entre ellos Birmania, Guinea Ecuatorial, Haití o Irán, y que limitará la visita de personas de otros siete, unas medidas que entrarán en vigor desde el próximo lunes, 9 de junio, y que justificó por el atentado terrorista del pasado domingo en Boulder, Colorado.
El escrito contempla excepciones para residentes legales permanentes, poseedores de visados vigentes, ciertas categorías de visados, y también para aquellos cuya entrada sirva a los “intereses nacionales de Estados Unidos”.
Estas medidas son producto de un informe elaborado por los departamentos de Estado y de Seguridad Nacional sobre las “actitudes hostiles” hacia Estados Unidos, un documento que el presidente estadounidense ordenó preparar al comienzo de su segundo mandato el pasado mes de enero.
Ambas listas de países están sujetas a cambios “si se producen mejoras sustanciales”, señaló Trump en un vídeo difundido en su plataforma Truth Social, donde aseguró que “de igual modo, se pueden añadir nuevos países a medida que surjan amenazas en todo el mundo”.
El mandatario defendió el anuncio refiriéndose al atentado del pasado domingo en Boulder, Colorado –cuyo autor confeso tenía un visado de turista que expiró en febrero de 2023– y alertó de “los serios peligros que supone el ingreso al país de ciudadanos extranjeros que no han sido debidamente investigados o que han permanecido más tiempo del permitido por sus visados”.
Como en otras ocasiones, culpó a su predecesor, Joe Biden, de que “actualmente, hay millones y millones de ilegales que no deberían estar en nuestro país” y se jactó de las “exitosas” restricciones de viaje aplicadas durante su primer mandato, asegurando que permitieron “prevenir importantes atentados terroristas extranjeros en suelo estadounidense”.
“No podemos permitir la migración abierta desde cualquier país en el que no podamos examinar y seleccionar de forma segura y fiable a quienes desean entrar en Estados Unidos. (…) Y nada nos impedirá mantener la seguridad de Estados Unidos”, aseveró.
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