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Franmil Reyes es demandado por incumplimiento de contrato ante un fondo de inversión

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Walton, del bufete Connolly Gallagher, ante el Tribunal Superior del estado de Delaware.

Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.

El expelotero de las Grandes Ligas Franmil Reyes fue demandado por Big League Advance Fund (BLA), una compañía que invierte en jóvenes jugadores a cambio de un porcentaje de sus futuros ingresos como profesionales.

De acuerdo con un reporte del portal especializado Sportico, BLA afirma que Reyes incumplió un acuerdo firmado en 2016 y adeuda US$404,908.87 en pagos pendientes, sumado a US$298,749.13 en intereses acumulados por retrasos. También se le reclama un monto adicional por las ganancias obtenidas en la liga profesional de Japón, cantidad que aún no se ha precisado.

Según la demanda, Reyes no ha realizado ni un solo pago desde el 23 de septiembre de 2022, a pesar de múltiples intentos de resolución privada a través de cartas enviadas por la empresa.

La acción legal fue presentada por los abogados Lisa R. Hatfield y Max B. Walton, del bufete Connolly Gallagher, ante el Tribunal Superior del estado de Delaware. El proceso se basa en una única acusación: incumplimiento de contrato.

El origen de la disputa se remonta a 2016, cuando Reyes, en ese entonces de 21 años y miembro del equipo Clase A Lake Elsinore Storm, afiliado a los Padres de San Diego, recibió US$301,840 de parte de BLA. A cambio, aceptó ceder el 10% de sus ingresos en el béisbol profesional, siempre y cuando estos superaran los US$100,000 anuales.

El contrato estipulaba que esa participación abarcaba ingresos en Grandes Ligas, ligas menores y en la Nippon Professional Baseball de Japón, incluyendo salarios, bonos y pagos relacionados con el rendimiento.

Entre 2018 y 2023, Reyes fue parte de cuatro organizaciones de MLB: Padres, Guardians, Cubs y Royals. Tuvo temporadas destacadas en 2018 y 2021, cuando conectó 37 y 30 cuadrangulares, respectivamente. Tras disminuir su rendimiento en las temporadas siguientes, emigró al béisbol japonés, donde ha jugado los últimos dos años con los Hokkaido Nippon-Ham Fighters. Actualmente, tiene 29 años y, según los documentos del caso, reside en Japón.

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