Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
La estrella de los Pacers de Indiana sabe que su trabajo es llevar al equipo al campeonato. Sus detractores creen que es un jugador “sobrevalorado”.
Considerado por sus oponentes como el más “sobrevalorado” de la NBA, Tyrese Haliburton ha transformado las críticas en impulso con actuaciones épicas en estos ‘playoff’, llevando a los Pacers a sus primeras Finales en 25 años.
“No me preocupan las opiniones ajenas”, afirmó Haliburton tras conocer el resultado de la encuesta anónima en la que participaron 90 jugadores de la NBA.
“Debo estar haciendo algo bien”, añadió. El “sobrevalorado” más decisivo.
Lo cierto es que Haliburton fue fundamental en las tres series que llevaron a los Pacers a las Finales, quienes terminaron cuartos en la temporada regular.
En el quinto partido de la primera ronda, anotó la bandeja decisiva a 1.3 segundos del final de la prórroga, tras una remontada de 20 puntos, sellando el pase de los Pacers por 4-1.
Haliburton cobró aún más protagonismo cuando su padre invadió la cancha y se encaró con Giannis Antetokounmpo, agitándole una toalla con la cara de su hijo estampada a pocos centímetros.
En la siguiente ronda, en Cleveland, Haliburton fue recibido con cánticos burlones de “sobrevalorado”.
El Madison de Nueva York, en las Finales del Este, fue el escenario de su siguiente hazaña: una canasta milagrosa que, tras rebotar alto en el aro justo al sonar la bocina, culminó una remontada increíble y forzó la prórroga.
Haliburton, convencido de haber anotado un triple ganador, se llevó las manos al cuello, emulando el gesto icónico de ahorcamiento que Reggie Miller dedicó al cineasta Spike Lee en ese mismo recinto, durante las Finales del Este de 1994.
En el cuarto partido de la serie, Haliburton firmó un triple-doble histórico con 32 puntos, 15 asistencias y 12 rebotes, sin una sola pérdida, para poner el 3-1 en la eliminatoria, una ventaja casi insuperable.
Brilló en el sexto y decisivo encuentro, con 21 puntos, 13 asistencias, 6 rebotes y 3 robos. Fue entonces cuando su propia afición le dedicó a su ídolo el infame cántico de “overrated”, que, resignificado, terminó llevándolos a las Finales.
A sus 25 años y en su quinta temporada en la NBA, no es ajeno a los comentarios que circulan sobre él.
Ídolo de los Pacers, suele bromear con que pasa demasiado tiempo en internet y, en sus redes sociales, no duda en responder a las provocaciones.
Haliburton tiene una personalidad fuerte y no parece haber venido a hacer amigos.
Tras ganar el oro olímpico en París el año pasado, a pesar de jugar solo 26 minutos (ninguno en la final), subió una foto con la medalla y escribió: “Cuando no hiciste nada en el trabajo en grupo y aún así te ponen un 10”.
Agregar Comentario