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Washington. Estados Unidos llevó a cabo ayer un ataque sumamente exitoso contra tres instalaciones nucleares iraníes, incluida la planta subterránea de enriquecimiento de uranio de Fordo, comunicó el presidente Donald Trump, en lo que la Organización de Energía Atómica de Irán tildó de acto de ilegalidad, fundado en la ley de la selva y que contraviene el derecho internacional, especialmente el Tratado de No Proliferación Nuclear, mientras congresistas estadounidenses catalogaron la acción como inconstitucional. Los otros dos objetivos impactados fueron Natanz e Isfahan.
Al cierre de esta edición, el canciller iraní, Abbas Araghchi, alertó en una publicación en X que los ataques estadounidenses tendrán consecuencias duraderas y que Teherán se reserva todas las opciones para tomar represalias.
“Estados Unidos, miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, ha cometido una seria transgresión de la Carta de Naciones Unidas, el derecho internacional y el TNP (Tratado de No Proliferación) al atacar las instalaciones nucleares pacíficas de Irán”, escribió Araghchi en la red social X.
El canciller afirmó: Irán se reserva todas las opciones para defender su soberanía, sus intereses y su pueblo, de acuerdo con la Carta de la ONU y sus disposiciones que permiten una respuesta legítima en defensa propia.
Un comunicado emitido posteriormente por la cancillería señala que el silencio ante esta agresión expone al mundo a un peligro sin precedentes.
La Guardia Revolucionaria de Irán declaró que Washington deberá enfrentar un severo castigo y que ahora todas sus instalaciones en Medio Oriente son un objetivo.
El magnate celebra el éxito militar espectacular.
En compañía del vicepresidente, J. D. Vance; el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y el secretario de Defensa, Pete Hegseth, Trump detalló, en un mensaje a la nación, que se efectuaron ataques de alta precisión sobre tres instalaciones nucleares clave para el enriquecimiento de uranio: Fordo, Natanz e Isfahán, que fueron destruidas por completo, y describió la maniobra como un éxito militar espectacular.
Irán, el hostigador de Medio Oriente, debe sellar la paz. Si no lo hace, los futuros ataques serán mucho mayores y mucho más fáciles. La mayoría de sus objetivos pueden ser eliminados en cuestión de minutos. Habrá paz o tragedia, añadió el magnate luego de felicitar al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por el trabajo en equipo.
En su mensaje desde la Casa Blanca, Trump recalcó que ningún ejército en el mundo podría haber hecho lo que hicimos esta noche, y anunció que el Departamento de Defensa realizará una rueda de prensa hoy a las 8 horas (6 am de México) para dar más detalles de la ofensiva.
No estaba claro si Estados Unidos continuaría atacando a Irán junto a su aliado Israel, que lleva nueve días en guerra con la república islámica. Trump actuó sin autorización del Congreso y advirtió que habría ataques adicionales si Teherán tomaba represalias contra las fuerzas estadounidenses. Habrá paz o habrá tragedia para Irán, puntualizó.
Se trató del primer ataque militar significativo de Washington en suelo iraní desde el derrocamiento del sha de Irán, Mohammed Reza Pahlevi, en 1979.
En Teherán, la Organización de Energía Atómica de Irán indicó: el enemigo estadounidense reivindicó a través del ciberespacio la autoría del ataque contra los mencionados centros, que se encuentran bajo la supervisión continua del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Exhortó a que la comunidad internacional condene los hechos y apoye a Teherán en la consecución de sus legítimos derechos.
A su vez, el líder demócrata de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, afirmó que Trump engañó al país y no solicitó la autorización del Congreso para realizar los ataques, por los que deberá asumir su plena responsabilidad.
En Tulsa, el senador independiente Bernie Sanders, calificó de inconstitucional el bombardeo, mientras la congresista palestino-estadounidense Rashida Tlaib indicó que la orden del magnate es una flagrante violación de la Constitución estadounidense. A las críticas se sumó la representante de Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez, quien pidió el impeachment de Trump. También el republicano Thomas Massie indicó que el hecho es inconstitucional.
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