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Santo Domingo. En su constante combate contra el narcotráfico, las autoridades dominicanas han logrado asestar fuertes golpes a redes criminales, tanto nacionales como internacionales. Sin embargo, estos avances también han generado una reacción, el incremento de métodos ingeniosos y cada vez más inusuales por parte de los narcotraficantes, quienes intentan burlar los controles en los puertos y aeropuertos del país.
Desde cerámicas que emulan limones hasta sillas de ruedas modificadas, los narcotraficantes han utilizado métodos que combinan creatividad, audacia y tecnología para ocultar drogas y transportarlas a Estados Unidos, Europa y otros destinos.
El caso más reciente se registró esta semana, cuando agentes antidrogas detectaron cuatro pares de zapatillas con plataforma rellenas de cocaína.
Previamente, se decomisaron 162 piezas de cerámica en forma de limón, con droga en su interior, durante un operativo en el Aeropuerto Internacional de Las Américas.
Coca en limones de cerámica
El caso más reciente fue reportado este lunes, cuando las autoridades incautaron 162 piezas de cerámica que simulaban ser limones, rellenas de cocaína, durante los trabajos de inspección realizados en el aeropuerto Internacional de las Américas.
Droga líquida en botellas de ron
La DNCD y el Ministerio Público confiscaron tres botellas que simulaban ser de ron, llenas de cocaína líquida en el Aeropuerto Internacional de Punta Cana, provincia La Altagracia.
Llaveros rellenos de cocaína
El 18 de octubre, agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y miembros del Ministerio Público incautaron 36 llaveros rellenos de cocaína, que serían enviados a Estados Unidos. Esta es una modalidad de narcotráfico a la cual las autoridades han dado seguimiento durante varios meses.
Los agentes de la DNCD se presentaron a una empresa de envíos internacionales en el Distrito Nacional, donde detectaron sustancias sospechosas dentro de una caja de color marrón, envuelta en cinta adhesiva.
Por instrucciones del fiscal, se procedió a abrir el paquete, encontrando decenas de llaveros con forma de tambores, bates y pelotas de béisbol. En 36 de esas pequeñas artesanías se descubrió más de medio kilogramo de cocaína, con un peso preliminar de 510 gramos.
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