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El jugador dominicano se unirá a los Gigantes a partir de este martes.
La trayectoria de Rafael Devers en el Oracle Park de San Francisco, que será su nuevo campo desde este lunes, se resume en solo tres juegos.
Aunque es un corto número de encuentros, su rendimiento no es alentador. Con un balance de 12-1, un doble para un bajo .083, con un boleto y dos ponches.
Tres jornadas no son suficientes para evaluarlo, pero el parque de los Gigantes es uno de los más complicados para los bateadores.
En la mayoría de los otros escenarios del Oeste de la Nacional, su desempeño ofensivo no ha sido bueno. Por ejemplo, en el Dodgers Stadium, en tres partidos batea de 12-1, también para .083, en el Chase Field, de Arizona tiene un promedio de .133 (15-2) en cuatro juegos, en el Petco Park, de San Diego su promedio es de .192 (26-5).
La única excepción es el Coors Field de Colorado, donde promedia .421 (19-8) con un jonrón y tres carreras impulsadas.
Generalmente contra equipos del Oeste
Antes de integrarse a los Gigantes, su promedio contra este club era de .243 (37-9), con dos dobles.
Pero, contra los rivales del Oeste, ante los Dodgers es de .233 (30-7) con un jonrón, contra los D-Backs es de .167 (24-4) con un cuadrangular y tres impulsadas, ante los Padres es de .222 (36-8) con cuatro jonrones. La única excepción son los Rockies a quienes les batea para .306.
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