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NUEVA YORK. — Una ola de calor de gran magnitud, con temperaturas sin precedentes y una humedad asfixiante, se abatió el martes sobre la mitad oriental de Estados Unidos, como consecuencia de una cúpula de calor que alcanzó su punto más álgido.
El Aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York marcó los 38 grados centígrados (100 grados Fahrenheit) poco después del mediodía, algo que no sucedía desde 2013. Más de 150 millones de personas amanecieron con alertas de calor, y el Servicio Meteorológico Nacional preveía que decenas de localidades igualarían o establecerían nuevas marcas diarias de temperatura alta el martes.
“Todos los estados de la Costa Este hoy, desde Maine hasta Florida, tienen posibilidad de llegar a una sensación térmica de 100 grados (Fahrenheit)”, señaló el meteorólogo privado Ryan Maue, ex científico jefe de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. “Que Maine alcance los 100 grados es algo inusual”.
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El calor del martes se sumó a 39 nuevos récords de calor, o empatados, del lunes. Pero tan peligroso como el calor de tres cifras es la ausencia de enfriamiento nocturno, impulsada por esa humedad.
“Se junta el calor extremo y la humedad, pero sin alivio”, declaró Jacob Asherman, meteorólogo del Centro de Predicción del Tiempo del servicio meteorológico. “Es una cosa tras otra… Esto muestra lo fuerte que es esta ola de calor. Es un evento bastante, bastante extremo”.
Asherman y Maue dijeron que el martes es el pico del sistema de alta presión que se cierne sobre el Atlántico Medio y mantiene el calor y la humedad a niveles muy altos.
“Es agobiante”, resaltó Maue, añadiendo que la cúpula está empujando el calor hacia abajo.
El calor golpeó la ciudad de Nueva York mientras los ciudadanos acudían a las urnas para votar en las elecciones primarias de la ciudad. En el barrio de Jackson Heights en Queens, Rekha Malhotra repartía folletos apoyando al candidato demócrata a la alcaldía Zohran Mamdani mientras llevaba un ventilador eléctrico rosa alrededor del cuello.
“Hace 90 mil grados y aquí estoy”, afirmó Malhotra, DJ de eventos. “Podría estar haciendo llamadas telefónicas”.
“Tengo de todo: sombrero, hielo y esto”, añadió Malhotra, sacando un spray de grado comercial de su bolso.
El calor y la humedad diurnos se vieron agravados por las noches pegajosas donde las temperaturas no descienden mucho y el cuerpo humano y la factura eléctrica no tienen respiro para recuperarse de lo peor del día, según Bernadette Woods Placky, meteoróloga jefe de Climate Central.
“Cuanto más dura el calor, más se agota el cuerpo, más se deteriora la salud, más se incrementa la factura energética”, señaló Woods Placky. “Así que un día tiene un impacto, pero cuando se suma a otro día y noche, y luego a otro día y noche, simplemente sigue acumulándose”.
Amtrak reportó retrasos el martes debido a las restricciones de velocidad causadas por el calor en rutas que atraviesan Washington, Filadelfia y Nueva York.
En otros lugares, el calor era peligroso. Dos excursionistas de 16 años fueron rescatados de una montaña en Jaffrey, Nueva Hampshire, el lunes por la tarde, abrumados por el calor, según el Departamento de Pesca y Caza de ese estado. Los jóvenes llegaron a desmayarse y fueron llevados a un hospital.
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