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El cantante canadiense lanzó por sorpresa su séptimo disco hace unas semanas. Después de cuatro años de infortunios, consigue un récord de reproducciones en un día y se posiciona número 1.
España.- El pasado jueves, Justin Bieber anunciaba en sus redes sociales su último trabajo, “Swag”, con unas fotos de vallas publicitarias en Nueva York, Atlanta, Los Ángeles y Reikiavik. Unas horas después, su séptimo álbum de estudio ya estaba en todas las plataformas digitales. Sin mayor promoción.
Los 21 temas estaban disponibles para su disfrute. Y este ha sido voraz por parte de su comunidad de fans en los últimos días. En su primera jornada en Spotify, las reproducciones del álbum superaron los 74 millones, el segundo más escuchado en su debut -tras “Music” de PlayBoi Carti- en un año donde han lanzado música Lady Gaga y The Weeknd.
En ese primer día, las 21 canciones de “Swag” estaban dentro del Top 50 de Spotify -ayer se mantenían siete con “Daisies” en el top 5- y el canadiense batió su propio récord de reproducciones en la plataforma en un solo día. El viernes, Justin Bieber sumó 98.5 millones de reproducciones en toda su música.
En cuestión de horas
Nunca se había escuchado tanto durante 24 horas. De hecho, ese dato es aproximadamente un 20% más que su máximo anterior y le ha permitido ascender hasta el octavo puesto de los artistas más escuchados del servicio de streaming, superando a Taylor Swift y Bad Bunny, con casi 87 millones de oyentes mensuales. Además, las cifras de “Swag” aún siguen creciendo a buen ritmo.
El nuevo álbum de la estrella del pop ya superaba en la tarde de ayer los 121 millones de reproducciones y, según las predicciones que se hacen desde Estados Unidos, este podría rondar las 175 en su primera semana. Eso le haría casi con total seguridad colocarse en lo más alto del Billboard 200 y desplazar a “I’m The Problem”, de Morgan Wallen, tras siete semanas como lo más escuchado en Estados Unidos.
Un empujón profesional que llega en medio de los rumores de una recaída en las adicciones y de problemas de salud mental, acrecentados por las imágenes recientes de un Bieber demacrado.
El pasado mes de mayo, un documental de TMZ advertía también de que el canadiense estuvo al borde de la quiebra en 2022 y que por eso, en diciembre de ese año, se lanzó a vender todo su catálogo musical a Hipgnosis Songs.
Justin Bieber entregó a la empresa británica, que ahora es propiedad del fondo de inversión Blackstone, los derechos de 290 canciones por un valor de 200 millones de euros.
Cantante
— Renace
La revista Rolling Stone publicaba que el cantante Justin Bieber quería romper desde hacía mucho tiempo con quien había dirigido su carrera.
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