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Hola Fiebruses. Acaba de concluir la temporada de Majors del año con la edición 123 de The Open Championship, siendo el norteamericano Scottie Scheffler quien se alzó con el trofeo, levantando la codiciada “Claret Jug” y sumando así su cuarto torneo grande en su joven, pero intensa carrera. Rory ganó el Masters y obtuvo el ansiado “Grand Slam”; luego, el U.S. Open lo ganó J.J. Spaun (el primero para él); y el PGA Championship se lo llevó Xander Schauffele, quien también saboreó la gloria en Valhalla. Pero volvamos al nacido en Nueva Jersey. De Scheffler se ha escrito de todo. Retrocedemos un año atrás, cuando, camino a jugar el tercer Major del año, el PGA Championship, fue detenido, puesto bajo custodia en una patrulla policial, vestido con ropa naranja y luego encarcelado. En lugar de quejarse por ser el número 1 del mundo en busca de un mejor trato o una disculpa, aceptó su realidad, recitando versos bíblicos y haciendo ejercicios de calentamiento y estiramiento durante su breve estancia en prisión. Menos de cinco horas después, volvía al campo, logrando un birdie en su primer hoyo de acción. Si eso no es resiliencia, díganme ustedes qué es.
Con estoicismo, este “muchacho” (apenas tiene 29 años) nos recuerda la “era de Tiger”, en la que el dominio de Woods era predominante y era el dueño y favorito en cada evento. En los medios se dio a conocer una coincidencia increíble: A Tiger le tomó exactamente 1.197 días para conseguir su cuarto Major tras ganar el primero, el mismo número que a Scottie, lo que ha encendido los portales de golf, ya que desde hace tiempo se busca comparar las carreras de ambos. En ganancias ha generado 19,2 millones (jugando), pero en 2024 hizo 29 millones + 40 millones en bonos. En cuanto a toda su carrera, Scheffler lleva 91 millones ganados, ubicándose en el tercer lugar de todos los tiempos, solo detrás de Rory (107 millones) y Tiger (120 millones). No cabe duda de que “se los lleva a ambos con ventaja” (obviamente, los tiempos son diferentes y hoy en día se gana mucho más dinero que hace años). Entre los 26 y 29 años, después de 81 torneos jugados por él y 79 por Tiger, Scheffler tiene 20 triunfos, 4 Majors y 2 The Players Championship. Por su parte, Tiger tiene 18 triunfos, la misma cantidad de grandes y 0 en The Players. Pero, a pesar de ser una mega estrella en el campo, en lo que más destaca Scottie es en su grandeza personal. Está casado desde 2020 y tienen un hijo llamado Bennet. Ese pequeño fue la verdadera estrella de la premiación, cuando su padre puso el trofeo en el suelo y lo alzó en brazos, mientras abrazaba a su esposa Meredith. Después de ganar el Masters de 2022, luego de las giras obligatorias que ese triunfo conlleva, en lugar de ir a un lugar de lujo, se fue a un pueblecito cerca de Dallas para pasar unos días en familia y tranquilidad, alejado de todo, así que estamos ante un “animal diferente”. Si eso no es grandeza, díganme ustedes qué es.
* Redes: @fiebredegolf en Instagram, Facebook y Twitter. Nos vemos cuando nos veamos, Fiebruses.
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