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Cádiz (1973) Redactor y editor experto en tecnología. Escribe profesionalmente desde 2017 para medios y blogs en español.
Cuando instalas una app en tu móvil, es frecuente que solicite acceso a la ubicación. Lo que muchos usuarios desconocen es que existen diferentes niveles para este permiso. Uno de los más sensibles es el acceso a la ubicación en segundo plano, que permite a una app saber tu posición incluso cuando no la estás usando de forma activa.
Este tipo de permiso puede ser útil para funciones legítimas, como registrar rutas deportivas en apps de ejercicio, recibir alertas meteorológicas localizadas o automatizar tareas según tu ubicación, como sucede con algunas apps domóticas. Sin embargo, también abre la puerta a prácticas que pueden afectar tu privacidad y el consumo de batería si no se controla de manera adecuada.
Ubicación en uso y en segundo plano
Cuando una app accede a tu localización solo mientras la usas, significa que solo puede rastrear dónde estás si tienes la app abierta y visible en pantalla. Esto es lo más aconsejable para la mayoría de usuarios.
Por el contrario, si una app tiene acceso a la ubicación en segundo plano, puede seguir obteniendo tu posición aunque no la estés utilizando directamente. Esto ocurre, por ejemplo, cuando una app de mapas registra constantemente tu trayecto, o cuando una red social quiere geolocalizar tus publicaciones automáticas sin que te enteres.
Cómo saber qué apps tienen este permiso
Tanto Android como iOS te permiten revisar fácilmente qué aplicaciones tienen acceso a tu ubicación y en qué condiciones:
En ambos sistemas es recomendable limitar el permiso a “Al usarse” para todas aquellas que no necesiten operar en segundo plano de manera justificada. Si ves alguna que tiene acceso completo sin una razón clara, revísala o incluso desinstálala si no la usas.
Impacto en privacidad, batería y rendimiento
Permitir el acceso a la ubicación en segundo plano no solo tiene implicaciones de privacidad, sino que puede afectar el rendimiento general del móvil. Este seguimiento constante incrementa el consumo de batería, genera tráfico de datos innecesario y, en algunos casos, puede ralentizar el sistema si la app está mal optimizada.
Además, no todas las apps explican claramente por qué necesitan saber dónde estás todo el tiempo. Algunas utilizan esa información con fines publicitarios o de análisis de comportamiento, lo cual ha sido motivo de sanciones a grandes plataformas en los últimos años.
Gestionar mejor la ubicación en segundo plano
Para mantener un control total sobre tu privacidad y el buen funcionamiento del móvil, conviene seguir estas pautas:
Controlar la ubicación en segundo plano es una forma sencilla pero efectiva de proteger tu privacidad, reducir el consumo de batería y mantener tu móvil funcionando de la mejor forma posible.
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