Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
WASHINGTON (AP) — El presidente estadounidense, Donald Trump, declara que está sopesando la posibilidad de “revocar” la ciudadanía estadounidense a una enemiga de hace tiempo, la actriz y comediante Rosie O’Donnell, pese a una resolución de la Corte Suprema de hace varias décadas que prohíbe expresamente esa acción por parte del gobierno.
El sábado, Trump escribió en una publicación en redes sociales: “Dado que Rosie O’Donnell no favorece los intereses de nuestro Gran País, estoy pensando seriamente en quitarle su ciudadanía”. Agregó que O’Donnell, que se mudó a Irlanda en enero, debería quedarse en Irlanda “si la quieren”.
Ambas personalidades se han criticado públicamente durante años, en un intercambio a menudo áspero que precede a la participación de Trump en la política. En los últimos días, O’Donnell fustigó en redes sociales a Trump y las medidas recientes de su gobierno, incluyendo la firma de un extenso plan de recortes de impuestos y gastos respaldado por el Partido Republicano.
Esta es la más reciente amenaza de Trump de retirar la ciudadanía a personas con las que ha discrepado públicamente, como su exasesor y antiguo aliado, Elon Musk.
Pero la situación de O’Donnell es notablemente diferente a la del dueño de Tesla, quien nació en Sudáfrica. O’Donnell nació en Estados Unidos y goza de un derecho constitucional a la ciudadanía estadounidense. El Departamento de Estado de Estados Unidos indica en su sitio web que los ciudadanos estadounidenses por nacimiento o naturalización pueden renunciar a la nacionalidad estadounidense al realizar ciertos trámites, pero solo si el acto se lleva a cabo de manera voluntaria y con la intención de renunciar a la ciudadanía.
Amanda Frost, catedrática de derecho de la Facultad de Derecho de la Universidad de Virginia, señaló que la Corte Suprema dictaminó, en un caso de 1967, que la Decimocuarta Enmienda de la Constitución estadounidense impide al gobierno revocar la ciudadanía.
“El presidente no tiene la potestad para quitar la ciudadanía a un ciudadano estadounidense nacido en el país”, comentó Frost el sábado en un correo electrónico. “En pocas palabras, somos una nación fundamentada en el principio de que el pueblo elige al gobierno; el gobierno no puede elegir al pueblo”.
O’Donnell se trasladó a Irlanda después de que Trump superara a la vicepresidenta Kamala Harris para obtener su segundo mandato. Ha dicho que está en proceso de obtener la ciudadanía irlandesa basándose en su linaje familiar.
El sábado, en respuesta a Trump, O’Donnell escribió en redes sociales que había molestado al presidente y “añádanme a la lista de personas que se oponen a él en cada paso”.
___
Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la asistencia de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
Agregar Comentario