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Los Knicks de Nueva York tienen como objetivo reconstruir su equipo para la temporada 2025-26, en la que buscarán de nuevo el codiciado título que tanto se les ha resistido, o al menos avanzar más allá de la Final de Conferencia Este, donde llegaron en la temporada anterior, perdiendo contra los Indiana Pacers en seis partidos.
No obstante, un gran problema se cierne sobre los planes del equipo de la Gran Manzana: El elevado salario de Karl Anthony Towns.
El destacado pívot estadounidense de origen dominicano, fichado por los Knicks durante la temporada pasada desde los Minnesota Timberwolves, percibirá 171,2 millones de dólares en los próximos tres años, si decide ejercer su opción de jugador para la temporada 2027-28.
Esta situación es un tanto paradójica, especialmente porque los directivos de los Knicks conocían el alto costo y la calidad de KT antes de incorporarlo al equipo. Pero en el gran negocio de la NBA, todo es posible.
Para los planes actuales de los neoyorquinos de hacer cambios importantes en su plantilla en busca del éxito, esto representa un gran obstáculo con el límite salarial. Y las restricciones financieras podrían forzarlos a reestructurar el equipo.
Expertos de la NBA sugieren que, de manera similar a cómo los Boston Celtics se deshicieron de Kristaps Porzingis este verano, los Knicks podrían considerar traspasar a su pívot estrella para disminuir gastos.
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