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Río de Janeiro.- El delantero brasileño Neymar, quien volvió al Santos a principios de 2025 para intentar recuperar su forma tras un año inactivo por lesiones en el Al-Hilal saudí, declaró este jueves que dejará el equipo paulista cuando su afición crea que está perjudicándolo.
El exjugador del Barcelona y del PSG hizo la advertencia en un extenso mensaje que publicó en sus redes sociales para justificar la acalorada discusión que tuvo el miércoles por la noche con un hincha del Santos, después de la derrota por 1-2 que el equipo sufrió en casa contra el Internacional y que lo hundió aún más entre los cuatro últimos de la tabla de la Liga, con peligro de descenso.
“Llegué al Santos para tratar de ayudar al club de la mejor manera posible, tanto dentro como fuera del campo, pero el día que la afición considere que no puedo aportar más o que estoy perjudicando al club de alguna manera, seré el primero en hacer mis maletas y marcharme”, afirmó.
El ídolo de la selección brasileña añadió que el Santos es una de sus pasiones y que, mientras tenga fuerzas, se esforzará al máximo por el club.
“Voy a correr, luchar, gritar y hasta pelear si es necesario para lograr colocar al Santos en el lugar que merece”, afirmó.
Desde su regreso al club de Pelé, en febrero pasado, e igualmente afectado por lesiones, Neymar solo ha jugado 15 partidos oficiales, con un balance discreto de cuatro goles y tres asistencias. En el Campeonato Brasileño suma siete encuentros y un solo tanto.
El delantero atribuyó su discusión del miércoles a la dificultad de “controlar los sentimientos” cuando recibe ofensas que considera injustas.
“Nunca voy a discutir con el hincha cuando me exija por lo que hago dentro de la cancha. En ese caso, él tiene el derecho de opinar si jugué mal o no, y tiene todo el derecho de abuchear”, dijo.
Pero aclaró que no puede admitir ofensas como las que le dirigió el aficionado con el que discutió.
“Decir que soy un mercenario junto a mi padre (su representante), hablar de mi familia y de mis amigos… Disculpen, pero es difícil controlarme (incluso sabiendo que tengo que hacerlo)”, agregó.
A diferencia de Neymar, que no se disculpó por su comportamiento, el aficionado con el que discutió en las gradas sí lo hizo por su tono agrio y las groserías que intercambió con el futbolista.
El aficionado le exigió a gritos a Neymar “honrar” la camiseta del Santos y el delantero le respondió que está dando la vida por el equipo.
Sin haber recuperado aún su mejor versión, Neymar tiene poco más de un mes para convencer al técnico de la selección brasileña, Carlo Ancelotti, de convocarlo para las dos últimas jornadas de eliminatorias sudamericanas para el Mundial de 2026.
La Canarinha, ya clasificada, se enfrentará en septiembre a Chile en el Maracaná de Río de Janeiro y visitará a Bolivia en El Alto.
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