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El adolescente haitiano de 13 años, quien fue alcanzado por un rayo mientras se bañaba bajo la lluvia junto a otros dos niños que, lamentablemente, perdieron la vida en Manoguayabo, se encuentra estable, en su segundo día de ingreso en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Robert Reid Cabral.
Mabel Jones, directora del centro médico, informó al periódico Hoy que la descarga eléctrica afectó el hemicuerpo derecho del menor.
“En el examen físico, el paciente se encuentra estable, orientado en tiempo y espacio. El día de ayer mostró un ligero aumento de la presión arterial con presencia de oliguria leve, por lo cual se instaló la medicación adecuada para manejar esta sintomatología, encontrándose el paciente hoy en condiciones estables”, señaló Jones.
Actualmente, el niño permanece orientado y se espera una analítica para decidir si puede ser trasladado desde cuidados intensivos a una sala de observación.
El accidente natural ocurrió mientras tres niños, incluyendo las dos víctimas mortales, jugaban bajo la lluvia sin prever el peligro.
Según testigos, los menores disfrutaban del aguacero, como solían hacerlo, en un campo de juego del sector, cuando un rayo cayó repentinamente sobre ellos, causando la muerte inmediata a dos de ellos.
“Yo estaba parado en la ventana de mi casa y vi cuando ese rayo inmenso cayó. Impactó a tres niños, donde había uno apartado. Uno cayó muerto en seco… Y el otro se me murió en las manos”, relató consternado Gregory Peralta, residente de la zona, quien presenció el suceso.
Los restos de una de las víctimas, identificado como Yelian de los Santos, de 13 años, fueron velados la tarde del mismo sábado en la Iglesia Cristiana Círculo, ubicada en la comunidad.
De los Santos fue descrito por su madre, Luz García, como un niño aplicado, humilde y cariñoso. Entre lágrimas, aseguró que con la pérdida de su pequeño también se le fue un pedazo del alma.
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