Actualidad

¿Quién es Norberto Rosario, el religioso que suscita interés al establecer sus normas en una escuela?

8808536863.png
Cada miércoles visitaba el Liceo Cabrera, en la ciudad homónima, y cada jueves el Liceo Antorcha del Futuro, en Río San Juan, para dar charlas.

Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.

Con 25 años de sacerdocio defendiendo a los más vulnerables y sirviendo mediante la educación.

El sacerdote Norberto Antonio Rosario Ovalle, párroco de la iglesia San Francisco de Asís, en María Trinidad Sánchez, y a su vez director de un centro educativo de secundaria, se ha hecho viral en los últimos días por sus declaraciones sobre las normas con las que rige la escuela que se le ha confiado en esa provincia.

Para quienes lo han conocido, el tono y el mensaje no son novedad. El sacerdote, servidor en la Diócesis de San Francisco de Macorís, ha aprovechado muchas de sus homilías para denunciar injusticias contra los más vulnerables.

Uno de los más recientes fue el caso de un desalojo ilegal que se produjo en Habitad, El Factor. Hay un video difundido por Amaury Reyna en Facebook donde el presbítero se compromete a aclarar la situación y tocar las puertas necesarias para “descubrir el maco tapa´o” tras la mencionada acción.

En 2022, mientras ejercía como párroco en Villa Riva (provincia Duarte), donde estuvo seis años, hizo un llamado a los comunitarios a empoderarse y denunciar el microtráfico de drogas con los puntos “que todo el mundo sabe” y conoce.

Asimismo, en otra ocasión, pidió a la justicia revisar la decisión tomada ante el caso de tres jóvenes, acusadas de atacar y propinar una golpiza a una cuarta joven, a quienes se les impusieron visitas periódicas.

En la misa de acción de gracias por su más reciente aniversario de ordenación, el padre Norberto Rosario describió su ministerio sacerdotal como muy fructífero, marcado por el servicio y el silencio.

“Todos estos años, 25 años de vida sacerdotal, sí tienen sentido, cada gesto, cada acción significativa o silenciosa que yo realice (…) nunca he sentido mi ministerio sacerdotal como un ministerio inútil”, dijo al iniciar la homilía del pasado 24 de junio, con una casulla del Jubileo del año 2000.

Desde los inicios de su sacerdocio, Rosario, quien se describe como un hombre de carácter fuerte, se ha dedicado a trabajar con grupos sociales.

“Siempre me ha sido muy difícil estar en una comunidad y hacerme de la vista gorda”, expresó, asegurando que no ha tenido miedo a enfrentar el crimen organizado y a denunciar los crímenes y delitos que afectan a los feligreses.

De igual forma, otra de las maneras “más bonitas de servir” para el padre Norberto es la educación.

“Por eso creo tanto en la educación, el servicio de liberar las mentes, los corazones; educar a la gente, nuestro país necesita tanto de eso”, añadió.

Rosario fue ordenado sacerdote un 24 de junio del 2000 junto a otros 24 jóvenes de todo el país, en el Coliseo de Boxeo Carlos Teo Cruz.

Tras la ordenación, su primera misión fue acompañar junto a otros dos jóvenes recién ordenados y un diácono al hoy arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria, que en ese entonces tenía poco tiempo de haber sido nombrado obispo de la diócesis de San Francisco de Macorís.

Luego de culminado el servicio, fue designado como vicario de las parroquias Santa Cruz, de Cabrera, y San Juan Bautista, de Río San Juan, en su diócesis natal.

En su tiempo por allí ya se veía su entrega en el acompañamiento a jóvenes. Cada miércoles visitaba el Liceo Cabrera, en la ciudad homónima, y cada jueves el Liceo Antorcha del Futuro, en Río San Juan, para dar charlas. También disponía dos horas adicionales para escuchar a los adolescentes en la confesión o en direcciones espirituales.

Un año después lo movieron como vicario junto al sacerdote Lauterio Fermín Acosta a la parroquia de Payita y también como administrador parroquial en Las Gordas, en este último municipio estuvo casi cinco años.

Más adelante, según contó en la eucaristía de aniversario, fue trasladado como vicario de la parroquia Santísima Trinidad y administrador parroquial de Los Limones.

En febrero de 2008 fue a Austria a estudiar Teología gracias a una beca. Su primera misa en ese país la celebró un 3 de marzo con alrededor de 29 personas y, con el tiempo, las comunidades parroquiales, compuestas por latinos, fueron creciendo.

También sirvió por tres años a una comunidad española en Viena y a otra de latinos en Graetz; además, fundó una comunidad de católicos latinos en Linz.

Al dejar Europa, su nuevo destino fue Villa Riva, donde estuvo seis años. En ese municipio incluso llegó a impartir diplomados junto a centros de educación superior de la región, revelando otra de las características de su entrega sacerdotal: la formación de los feligreses.

El padre Norberto ha buscado la edificación del criterio de las comunidades parroquiales y territoriales que les han sido confiadas, “que sepa porqué cree y qué es lo que nosotros como Iglesia profesamos y proclamamos”.

Fundamentándose en un acuerdo que existe entre el Ministerio de Educación y la Iglesia, hace unos días el padre Norberto manifestó que, como colegio católico, tienen derecho a establecer normativas.

En una de sus homilías, el sacerdote planteó una serie de reglas a implementarse para el nuevo año escolar 2025-2026 en el centro que dirige.

“No muchachos con pajones, no muchachos con cejas tajeadas, nada de eso, la pelada un poquito más alta que esta (haciendo referencia a su cabello)” detalló Rosario.

Dijo que estará en la puerta de su centro educativo para controlar la entrada y resaltó que la hora de ingreso es a las 7:30 de la mañana, “máxime a las 7:45, el que no esté a las 7:45, chao. Que no venga ningún papá a reclamar después y mucho menos el distrito”.

TRA Digital

GRATIS
VER