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Salt Lake City.- Charlie Kirk, activista ultraconservador y creador de Turning Point USA (TPUSA), cercano colaborador del expresidente Donald Trump, resultó muerto este miércoles en un evento público en una universidad situada en las afueras de Salt Lake City, Utah, según fuentes locales.
Kirk, de 31 años, había sobresalido desde temprana edad por su activismo conservador y por promover la implicación de la generación Z en la política de EE. UU. Inició su trayectoria a los 17 años como voluntario en la campaña senatorial del republicano Mark Kirk en Illinois, y poco después colaboró con la página ultraconservadora Breitbart News, señalando presuntos sesgos progresistas en los libros de texto. Su desempeño captó la atención de Fox News, donde se consolidó como una voz relevante dentro del movimiento MAGA (Make America Great Again).
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En 2012, Kirk creó Turning Point USA, una entidad sin ánimo de lucro que pretende reforzar el conservadurismo en los campus universitarios. La asociación, respaldada por destacadas personalidades de la derecha norteamericana, dispone de más de 800 capítulos en instituciones académicas de todo el territorio.
Con TPUSA, Kirk puso en marcha concentraciones masivas que difundían la militancia anti‑woke, la defensa del libre mercado y la disminución del tamaño del Gobierno, consolidándose como una figura clave del proselitismo juvenil conservador.
Charlie Kirk residía en Scottsdale, Arizona, estaba casado con Erika Frantzve, con quien tuvo dos hijos, y profesaba la fe evangélica. Al enterarse del asesinato, Frantzve difundió un pasaje bíblico en su perfil de X.
Kirk era hijo de una consejera de salud mental y de un arquitecto, ambos siguen con vida. Su rápido ascenso en la política republicana lo impulsó a dejar la universidad sin obtener el título.
Su fallecimiento representa un fuerte revés para la derecha estadounidense y el movimiento MAGA, dejando un vacío en la entidad que él mismo contribuyó a consolidar por más de diez años.
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