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El Ministerio de Salud Pública comunicó que el suministro de agua potable a los domicilios dominicanos mediante los sistemas de acueductos resulta seguro para usos domésticos, gracias al proceso de cloración y a la supervisión sanitaria que efectúa en cada provincia.
El viceministro de Salud Colectiva, Eladio Pérez, señaló en un comunicado que es fundamental distinguir entre la resistencia bacteriana a los antibióticos y la acción desinfectante del cloro en el agua.
“Que una bacteria presente resistencia a los antibióticos implica que ciertos fármacos no la erradican en una infección clínica. No obstante, eso no indica que sea resistente al cloro. El cloro sí aniquila esas bacterias y asegura que el agua sea apta para uso doméstico”, afirmó.
Añadió que la tonalidad del agua y la calidad estética del servicio (olor, sabor, turbidez) son responsabilidad de las entidades de agua potable y alcantarillado, como Inapa y las Coraas.
Declaró que monitorean continuamente los niveles de cloro residual libre en cada provincia y garantizan el cumplimiento de los estándares internacionales de seguridad.
Agradeció y elogió la postura de la Sociedad Dominicana de Infectología (SDI), reconociendo su papel y sus útiles recomendaciones para combatir la amenaza de la resistencia antimicrobiana.
Pérez subrayó que la aportación de la Sociedad de Infectología ha sido un aliado fundamental y ha participado activamente en las mesas de trabajo que han moldeado el plan nacional que será presentado en octubre.
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