Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump informó el sábado que presentará la candidatura de Lindsey Halligan, asesora senior de la Casa Blanca, para el puesto de fiscal federal del Distrito Este de Virginia, tras la destitución del titular el viernes. En un mensaje en sus redes tras salir de la Casa Blanca para asistir a un acto en Mount Vernon, Trump dijo que nominaba a Halligan como fiscal del distrito, asegurando que será “equitativa, inteligente y entregará ¡JUSTICIA PARA TODOS!, una exigencia urgente”. La declaración llega mientras Trump presiona a la secretaria de Justicia Pam Bondi para que avance la persecución de casos contra varios de sus adversarios políticos, parte de una agenda de represalias que ha marcado su retorno a la Casa Blanca.
La posible designación pondría a una de las defensoras del presidente al frente de una oficina sumida en el caos, producto de la presión de funcionarios de Washington para acusar penalmente a la fiscal general de Nueva York, Letitia James, enemiga histórica de Trump, en una investigación de fraude hipotecario. Erik Siebert, quien había ocupado el cargo de fiscal jefe de la fiscalía de Virginia, renunció en medio de los intentos del gobierno de Trump de presentar cargos en esa investigación, que surge de supuestas irregularidades en documentos sobre la vivienda de James en Brooklyn y una propiedad en Virginia. El Departamento de Justicia ha llevado a cabo meses de indagación, pero todavía no ha formulado cargos y no existen indicios de que los fiscales hayan hallado pruebas suficientes para sostener una acusación. Los abogados de James niegan rotundamente cualquier delito y califican la pesquisa como una venganza política.
Halligan ha formado parte del equipo legal de Trump durante varios años, incluyendo su labor como una de sus abogadas en los primeros momentos de la pesquisa del FBI sobre la retención de documentos clasificados en Mar‑a‑Lago. Más recientemente, fue reclutada en un esfuerzo de la Casa Blanca para eliminar lo que el gobierno califica como “ideología inapropiada” de los museos del Smithsonian. Más temprano ese mismo día, Trump publicó en redes lo que parecía una carta abierta a Bondi, diciendo que había “revisado más de 30 declaraciones y publicaciones” que catalogó como críticas a su gestión por la falta de acción en las investigaciones, incluida la de las transacciones de James. En el mensaje, Trump mencionó al exdirector del FBI James Comey, el antiguo crítico de Trump al que destituyó en su primer mandato durante la investigación sobre la interferencia rusa en las elecciones.
El FBI confirmó este verano que estaba investigando a Comey, quien fue entrevistado por el Servicio Secreto tras una publicación en Instagram que los republicanos calificaron como un llamado a la violencia contra Trump. Comey explicó que no pretendía que la publicación fuera una amenaza y la borró una vez que comprendió la interpretación que se le daba. Interrogado al salir de la Casa Blanca sobre si estaba atacando a Bondi, Trump respondió que sólo buscaba avances. “Tenemos que actuar rápido, de una forma u otra”, declaró. “Si son culpables o no, debemos actuar pronto. Si no son culpables, está bien; si son culpables o deben ser procesados, deben ser procesados. Y lo hacemos ahora”. Al anunciar poco después la nominación de Halligan en redes, Trump elogió a Bondi diciendo que estaba “haciendo un GRAN trabajo”.
La designación de Halligan se produjo apenas unas horas después de que la abogada conservadora Mary “Maggie” Cleary enviara un correo electrónico al personal anunciando que había sido nombrada fiscal federal interina del Distrito Este de Virginia, según una copia revisada por The Associated Press. “Aunque este nombramiento fue inesperado, me honra unirme a su equipo”, expresó Cleary, quien ha afirmado haber sido acusada falsamente de participar en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021. Aunque Siebert había comunicado por correo a sus colegas el viernes por la noche su renuncia, Trump publicó en redes: “¡Él no renunció, yo lo despidí!”. El mandatario señaló que contaba con el respaldo de los dos senadores demócratas del estado, Mark Warner y Tim Kaine, y añadió: “La próxima vez, entrará como demócrata, no como republicano”. El reportero de The Associated Press Eric Tucker colaboró en este informe. Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la asistencia de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
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