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El canal de Telegram Mash comunicó este jueves que la mujer de 26 años “cedió oficialmente su alma” a cambio de una colección de muñecas y la entrada. “La Iglesia Ortodoxa Rusa la consideró pecadora y le aconsejó acudir de inmediato al psiquiatra (tachado) antes de que sea demasiado tarde”, señaló el medio.
Todo surgió como una broma de un especialista en marketing que se presentó bajo el nombre de Dmitri en su perfil de la red social y no esperaba ninguna reacción. “Una joven llamada Karina respondió, aceptó el trato, firmó el documento y lo selló con sangre”, informó Mash.
En su cuenta, Dmitri subió el comprobante del pago por la venta del alma y la foto de la chica sosteniendo el contrato, con los datos personales tachados. “Acabo de adquirir mi primera alma. El pacto quedó sellado con sangre. Me siento como el capitán Davy Jones, sin duda alguna”, escribió, haciendo referencia al legendario pirata de la saga Piratas del Caribe.
Mash asegura que a la joven le da igual haber vendido su alma y que le es indiferente quién sea el nuevo dueño. Según el medio, el comprador tampoco tiene clara la forma de emplear el alma recién obtenida.
Sin embargo, la Iglesia Ortodoxa Rusa no lo tomó a la ligera, al afirmar que Karina “de verdad vendió su alma y, por lo tanto, elegió el mal”, prediciéndole “caídas morales y personales, enfermedades, sufrimientos e incluso la muerte”.
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