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En la apertura de la vigésima Reunión Regional de la OIT, el presidente Luis Abinader hizo un llamado a forjar una América donde el trabajo sea sinónimo de dignidad, justicia y prosperidad compartida, con el objetivo de que el crecimiento económico se traduzca en mayor y mejor empleo, ampliación de la clase media y reducción de la pobreza.
Abinader recordó que el auténtico desarrollo debe medirse por la dignidad, los derechos y la calidad de vida de los trabajadores, no solo por los indicadores macroeconómicos. Señaló que, en la región, más de 300 millones de personas forman parte de la fuerza laboral, pero casi la mitad se desempeña en la informalidad, sin acceso a seguridad social ni a derechos esenciales.
En ese marco, el mandatario destacó los avances de la República Dominicana al colocar el empleo en el centro de sus políticas públicas. El país encabeza el crecimiento económico de América Latina y el Caribe con tasas superiores al promedio regional, que la CEPAL preveé en apenas 1.9 % para este año.
Resaltó la generación de más de 200 mil empleos formales después de la pandemia, el aumento del poder adquisitivo de los salarios reales y el hecho de que, por primera vez en décadas, el salario mínimo cubre, en promedio, el costo de la canasta básica en los sectores clave.
En el sector turístico, informó que en 2024 República Dominicana recibió más de 11 millones de visitantes, lo que supuso la creación de 750 mil puestos de trabajo directos y 870 mil indirectos.
Abinader subrayó que los retos actuales –la transición tecnológica, el cambio climático y las transformaciones demográficas– exigen instituciones sólidas y un contrato social renovado basado en la justicia, la inclusión y la sostenibilidad.
Indicó que, a nivel regional, solo el 47 % de las mujeres participa en el mercado laboral frente al 72 % de los hombres, una situación que calificó como injusta e ineficiente. “Si deseamos que América Latina sea competitiva, debemos garantizar que el talento femenino cuente con las mismas oportunidades para trabajar y progresar”, afirmó.
El presidente también destacó que la reunión, bajo el lema “Democracia, paz, trabajo decente y diálogo social: uniendo a las Américas para un futuro con desarrollo sostenible y justicia social”, debe servir de escenario para abordar cuatro prioridades esenciales: generación de empleo y protección social vinculados al desarrollo sostenible; fortalecimiento institucional y del diálogo social tripartito; transición justa frente al cambio climático, digitalización, movilidad humana y mejora de competencias; y formación profesional a lo largo de la vida.
Añadió que la igualdad de género, la inclusión de los jóvenes y el reconocimiento de la migración laboral deben ser ejes transversales para dinamizar las economías.
El encuentro se lleva a cabo en Punta Cana, con el ministro de Trabajo, Eddy Olivares, como presidente de la sesión, y contó con la participación del director general de la OIT, Gilbert F. Houngbo.
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