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El ostentoso estilo de vida de Sean “Diddy” Combs, una figura emblemática del hip‑hop, se derrumbó tras su sentencia penitenciaria. Ahora se encuentra ante la lúgubre posibilidad de cumplir varios años más tras las rejas, mientras su equipo legal prepara una apelación.
La imagen que Combs había labrado cuidadosamente —como empresario carismático, anfitrión de eventos de alto nivel y estrella de reality shows— se vio trastocada el pasado viernes. El artista y ejecutivo musical, galardonado con un Grammy, fue condenado a cuatro años y dos meses de prisión por transportar personas entre estados para mantener relaciones sexuales.
Este veredicto representó un ajuste de cuentas público para el músico de 55 años, quien solicitó clemencia y rompió a llorar mientras sus abogados proyectaban un video que mostraba su vida familiar, trayectoria profesional y acciones filantrópicas. El juez de distrito Arun Subramanian también impuso una multa de 500 000 dólares, el máximo permitido.
Combs había sido hallado culpable en julio por llevar a sus parejas y a sus trabajadores sexuales masculinos por todo el país para participar en encuentros bajo los efectos de drogas durante varios años y en distintos lugares. El controvertido proceso, que se prolongó casi dos meses en la corte federal de Manhattan, incluyó testimonios desgarradores de mujeres que aseguraron haber sido golpeadas, amenazadas, agredidas sexualmente y chantajeadas por el rapero.
Fue absuelto de los cargos de tráfico sexual y crimen organizado, que podrían haberle llevado a una cadena perpetua. Hasta la fecha ha cumplido un año de prisión, lo que indica que podría salir en unos tres años. La fiscalía había pedido una pena de más de 11 años. Los representantes de Combs demandaron su liberación inmediata y afirmaron que el tiempo en la cárcel ya lo había llevado a arrepentirse y a mantenerse sobrio. Asimismo, anunciaron que presentarán una apelación.
En el sistema federal no existe la posibilidad de libertad condicional. La fiscal Christy Slavik sostuvo que evitar una pena de prisión severa para Combs excusaría años de violencia. Testigos clave en su contra instaron al juez a rechazar cualquier indulgencia, alegando que temían por su seguridad si él quedaba libre.
¿Dónde está cumpliendo su condena Combs? Fue trasladado a una prisión federal de Brooklyn hace un año, después de que sus abogados fracasaran en mantenerlo fuera de la cárcel tras su arresto. El centro se usa principalmente para la detención previa al juicio de personas que esperan ser juzgadas en los tribunales federales de Manhattan o Brooklyn, y para reclusos con penas cortas.
Desde su apertura en los años noventa, la instalación ha enfrentado numerosos problemas; en tiempos recientes sus condiciones han resultado tan duras que algunos jueces se niegan a enviarla. A los defensores de Combs se les negó la solicitud de permitirle aguardar el proceso bajo arresto domiciliario en su mansión situada en una isla de Miami Beach, Florida. En cuanto al resto de su condena, existe una prisión federal para hombres cerca de su residencia.
Se trata de una institución correccional federal de baja seguridad en Miami, con un campo satélite adyacente de mínima seguridad. Según su página oficial, alberga a 1 000 internos, de los cuales 174 están en el campo y 826 en la institución principal.
Ley federal infringida
Combs fue sentenciado por violar la Ley Mann, una normativa federal centenaria contra la prostitución. Esta disposición prohíbe el transporte interestatal de personas con fines de prostitución u otros actos sexuales ilícitos. La ley fue modificada en la década de 1980 y hoy se emplea mayormente para procesar casos de prostitución interestatal o de menores trasladados entre estados con propósitos sexuales. El abogado defensor Jason Driscoll argumentó el viernes que la aplicación de la ley fue incorrecta.
El declive de “Diddy”
El derrumbe de la reputación de Combs comenzó cuando su exnovia de larga data, la cantante de R&B Cassie, testigo clave en el proceso penal, lo demandó en 2023 alegando abusos sexuales y físicos durante años. El acuerdo alcanzado ascendió a 20 millones de dólares, pero la demanda desencadenó una oleada de acusaciones similares por parte de otras mujeres y hombres.
La Associated Press normalmente no identifica a quienes afirman haber sido abusados sexualmente a menos que lo hagan públicamente, como lo hizo Cassie. La revelación el año pasado de una investigación federal sobre tráfico sexual, que incluyó redadas en casas de Combs en ambas costas, elevó las acusaciones a un nivel de mayor gravedad y visibilidad pública.
Cobertura en la cultura popular
El hallazgo de que los agentes federales confiscaron 1 000 botellas de aceite para bebé y otros lubricantes durante la redada rápidamente se filtró a la cultura popular. El caso convirtió a Combs en blanco de bromas y lo pintó como villano. Programas de entrevistas, “Saturday Night Live” y publicaciones en redes sociales explotaron la situación para hacer chistes sobre los “agresivos” y la enorme cantidad de aceite de bebé que utilizaba en sus maratones sexuales.
Otras celebridades fueron señaladas por sus anteriores relaciones con Diddy, aunque ninguna estuvo involucrada en los cargos criminales.
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