Tecnologia

Mientras que España discute la jornada de 37,5 horas, en Silicon Valley

2025 10 874031379.png
Equipo de trabajo durante la jornada de labor - DAVID ZORRAKINO / EUROPA PRESS

Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.

Equipo de trabajo durante la jornada de labor – DAVID ZORRAKINO / EUROPA PRESS

MADRID 27 Oct. (EUROPA PRESS) –

La disminución de la jornada laboral en España ha sido foco de discusión durante los meses recientes. El anteproyecto, impulsado por el Gobierno y refrendado en Consejo de Ministros, sigue estancado en el Parlamento tras la oposición de diversas agrupaciones políticas. Mientras esto sucede, en Silicon Valley, centro neurálgico de la tecnología en California, algunas compañías de inteligencia artificial están reviviendo una metodología totalmente opuesta: el horario ‘9-9-6’, que implica trabajar desde las nueve de la mañana hasta las nueve de la noche, seis días a la semana, sumando un total de 72 horas semanales.

Este contraste evidencia dos puntos de vista divergentes sobre la productividad. Mientras que en el entorno europeo el debate se centra en la armonización de la vida laboral y la eficacia, en Silicon Valley ciertas startups continúan vinculando el triunfo con la cantidad de horas invertidas y el sacrificio individual como motor principal de la innovación.

EL DEBATE EN ESPAÑA: MENOS DEDICACIÓN HORARIA, MISMO SALARIO

La iniciativa para reducir la jornada progresivamente -de 40 a 38,5 horas en 2024 y a 37,5 en 2025- contemplaba mantener las remuneraciones y reforzar la vigilancia del tiempo trabajado mediante sistemas digitales, tal como se propuso y aprobó en el Consejo de Ministros. No obstante, el Congreso rechazó su tramitación, dejando la medida a la espera de nuevos apoyos.

Actualmente, la duración máxima reglamentaria de trabajo en España sigue fijada en 40 horas semanales, a menos que los convenios colectivos establezcan una extensión menor. El Gobierno mantiene su deseo de retomar la propuesta en la próxima legislatura, siguiendo la línea europea hacia jornadas más reducidas, una práctica que ya se observa en países como Francia, Dinamarca o Bélgica.

EL ESQUEMA ‘9-9-6’: TRABAJAR 72 HORAS A LA SEMANA

Al otro lado del océano, la concepción del trabajo avanza en sentido contrario. Varias empresas tecnológicas emergentes han rescatado la conocida cultura del ‘9-9-6’, un sistema popularizado en China por Jack Ma, el fundador de Alibaba, que consiste en una jornada de 9 a 21 horas durante seis días a la semana.

Según reporta The Washington Post, compañías de reciente creación como Browser Use, Sonatic o Cognition, enfocadas en el desarrollo de inteligencia artificial, están adoptando versiones no oficiales de este cronograma. En numerosos casos, los empleados residen y desarrollan su actividad en los mismos recintos, con alojamiento y alimentación proporcionados, lo que minimiza los desplazamientos y permite avanzar con gran celeridad en los proyectos.

UNA CULTURA DE EXCESO Y ENTREGA TOTAL

Si bien no es una costumbre que se haya extendido por completo, The New York Times señala que este modelo es reflejo de una cultura empresarial que valora la dedicación absoluta y el trabajo sin restricciones. Algunos promotores incluso integran el término “996” en sus anuncios de empleo para indicar el nivel de compromiso que esperan de sus equipos.

Quienes defienden este modelo aducen que la intensidad laboral es indispensable en un entorno de feroz competencia mundial, especialmente en el ámbito de la inteligencia artificial, donde los progresos se midutan en el lapso de semanas. Sin embargo, otros expertos alertan sobre los riesgos para la salud física y mental que dicha organización laboral acarrea.

ENTRE LA CREACIÓN Y EL DESGASTE FÍSICO Y MENTAL

Los profesionales en el campo de la salud en el trabajo coinciden en que el exceso de horas trabajadas incrementa el peligro de estrés, agotamiento (burnout) y disminución de la capacidad creativa. The Washington Post recoge declaraciones de inversores que advierten que “exaltar la cultura del trabajo extremo” puede restringir el potencial humano y culminar en fatiga crónica.

De hecho, diversos estudios sobre el rendimiento laboral indican que, superado un determinado límite, las horas adicionales no se traducen en mejores resultados. Lejos de potenciar la invención y la novedad, la sobrecarga acaba perjudicando el desempeño y la facultad de concentración.

¿PODRÍA LA ‘9-9-6’ ARRAIGAR EN EUROPA?

Aunque una jornada de 72 horas parece ajena al contexto europeo, algunos analistas no descartan que la obligación de competir en sectores como la inteligencia artificial o la biotecnología pueda generar ambientes de trabajo similares en empresas emergentes del Viejo Continente.

Según detalla Fanpage.it, el modelo de Silicon Valley podría inspirar a algunas empresas europeas que buscan acelerar su crecimiento, especialmente en ámbitos tecnológicos donde la rapidez de desarrollo es crucial. No obstante, los marcos regulatorios y las políticas de conciliación vigentes en la Unión Europea funcionan como un muro de contención frente a una cultura que choca frontalmente con los principios de bienestar laboral y el necesario equilibrio vital.

TRA Digital

GRATIS
VER