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El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel comunicó a Listín que el regreso de los 28 rehenes fallecidos forma parte de una obligación ética del Estado y que, al recibir los cuerpos, el Instituto de Medicina Forense israelí efectuará las autopsias, los identificará, notificará a los familiares y los enterrar con el mayor respeto.
Este lunes regresaron a su patria después de más de dos años de cautiverio, 20 rehenes israelíes secuestrados por Hamás el 7 de octubre de 2023; sin embargo, la promesa de Israel es que todos vuelvan a casa y ninguno sea dejado atrás.
«Regresaron a Israel y no descansaremos hasta que los 48 rehenes estén nuevamente en territorio israelí; además de estos 20, otros 28 permanecen sin vida en la Franja de Gaza; cada rehén, vivo o muerto, tiene derecho a volver a su hogar, es nuestra garantía y la cumpliremos», precisó el vocero de las Fuerzas de Defensa de Israel para la prensa hispanohablante, Roni Kaplan, al conversar con LISTÍN DIARIO.
Kaplan añadió que el retorno de los 28 rehenes fallecidos constituye un deber moral del Estado y que, una vez recibidos los cadáveres, el Instituto de Medicina Forense de Israel realizará las autopsias, los identificará, informará a los familiares y los sepultará con el máximo honor.
«Repatriarlos, incluso después de su fallecimiento, refleja nuestra visión del mundo: nadie se queda atrás, ningún rehén es excluido; el acuerdo obliga a Hamás a devolver a todos los rehenes, vivos o muertos, sin excepción», manifestó Kaplan.
El portavoz subrayó que la pérdida de esos compatriotas representa «una herida en el alma de nuestra nación», por lo que serán enterrados con el máximo honor militar al arribar a Israel.
El acuerdo de paz propuesto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sigue en su fase inicial y se anticipa que en los próximos días continúe la entrega de los 28 rehenes sin vida restantes.
Como parte del mismo, Israel debía liberar presos palestinos; hasta la madrugada de este lunes había puesto en libertad a cerca de 2 000 internos, entre los cuales 250 cumplían condenas por delitos vinculados al terrorismo.
Roni Kaplan afirmó que las fuerzas armadas israelíes están «totalmente comprometidas» con el acuerdo mientras Hamás cumpla con sus obligaciones, y que se retirarán conforme a las directrices políticas recibidas.
«En este momento nos encontramos en lo que se conoce como la línea amarilla dentro de la Franja de Gaza; nuestras tropas mantienen posiciones defensivas a lo largo de esa línea y la seguridad de nuestro personal sigue siendo la prioridad máxima», agregó.
Aunque no reveló el número exacto de efectivos desplegados en la denominada línea amarilla, señaló que disponen de la cantidad necesaria para garantizar la protección y han solicitado a la población civil de Gaza que se mantenga alejada de las áreas de operaciones por su propia seguridad.
«También hemos pedido a los civiles en Gaza que se mantengan fuera de las zonas de acción, por su seguridad, y este alto al fuego ha sido posible gracias a la presión militar precisa y sostenida contra el grupo terrorista Hamás», concluyó.
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