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NUEVA YORK (AP) — Sean “Diddy” Combs fue condenado el viernes a cuatro años y dos meses de prisión por trasladar personas a través de fronteras estatales para facilitar encuentros sexuales, concluyendo un controvertido caso federal que incluyó testimonios desgarradores y terminó con una severa sanción para una de las figuras más emblemáticas del hip‑hop.
Combs, de 55 años, también recibió una multa de quinientos mil dólares. Dado que ya ha cumplido un año de reclusión, la sentencia implica que será liberado en aproximadamente tres años. Sus abogados solicitaron su puesta en libertad inmediata y argumentaron que el tiempo en la cárcel ya le ha obligado a arrepentirse y a mantener la sobriedad.
Fue hallado culpable en julio de transportar en avión a sus novias y a trabajadores sexuales masculinos por todo el país para participar en actividades sexuales bajo el influjo de drogas, una práctica que se prolongó durante varios años y en distintos lugares. Sin embargo, fue absuelto de los cargos de trata sexual y crimen organizado que podrían haberle impuesto cadena perpetua.
“¿Por qué tardó tanto?”, preguntó el juez federal de distrito Arun Subramanian al dictar la sentencia. “Porque tenía el poder y los recursos para seguir adelante, y porque no lo atraparon”.
Combs no mostró ninguna reacción visible al conocer la condena, permaneció sentado con la mirada fija al frente mientras el magistrado hablaba. Después, se mostró abatido, sin el entusiasmo ni las sonrisas que había exhibido antes con sus abogados y su familia.
En sus últimas palabras antes de la sentencia, Combs declaró ante el juez que sus años de conducta habían sido “repugnantes y vergonzosos” y se disculpó con las personas a las que hirió física y mentalmente. Aseguró que sus actos de violencia doméstica son una carga que llevará durante el resto de su vida.
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