Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
NUEVA YORK (AP) — El martes, Tesla presentó versiones más asequibles de dos de sus modelos eléctricos con la intención de reactivar sus ventas, que habían sido decepcionantes.
El nuevo Model Y, cuyo precio ronda los 40 000 dólares y cuenta con un interior simplificado, llegó después de que las ventas de Tesla disminuyeran durante la mayor parte del año pasado, afectadas por boicots anti‑Elon Musk dirigidos contra la compañía. También se lanzó una variante de menor costo del Model 3, por debajo de los 35 000 dólares.
La empresa se vio bajo fuerte presión para impulsar sus cifras, mientras enfrentaba retos considerables. Además de la reacción adversa a Musk, Tesla tuvo que confrontar una posible caída en la demanda tras la expiración, a finales de septiembre, del crédito fiscal federal de hasta 7 500 dólares para la compra de vehículos eléctricos.
Las acciones de Tesla descendieron más del 2,5 %, situándose en 441,08 dólares en la sesión vespertina del martes. El lunes cerraron con un alza superior al 5 % después de que la compañía suscitara intriga entre sus seguidores mediante mensajes crípticos en redes sociales sobre un próximo anuncio de producto.
El valor de la acción se ha mantenido cerca de sus máximos históricos, pese a que tanto las ventas como las ganancias han disminuido en los últimos trimestres.
En contraste con versiones previas, el nuevo Model Y ofrece una autonomía reducida de 594 km (321 millas), menos altavoces y un interior de tela en lugar de microgamuza. El modelo también prescinde del techo panorámico de vidrio y de la pantalla táctil en los asientos traseros.
Esta pieza fue traducida del inglés por un editor de la AP con el auxilio de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
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