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WASHINGTON. — AP. Los inoculantes anticovid mayormente empleados podrían proporcionar una ventaja inesperada para determinados pacientes oncológicos: potenciar sus defensas inmunitarias para coadyuvar en la lucha contra formaciones tumorales.
Individuos con cáncer pulmonar o cutáneo en fase avanzada que estaban bajo medicación específica de inmunoterapia extendieron su sobrevida si, adicionalmente, se les administró una dosis de la vacuna de Pfizer o Moderna en un lapso no superior a los 100 días desde el inicio de la terapia, conforme a un estudio inicial reportado este miércoles en la publicación especializada Nature.
Aparentemente, es la propia molécula que constituye el motor de estas vacunas concretas, el ARNm, la que favorece al sistema de defensas del organismo.
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