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ARIZONA. – Christopher Scholtes, de 38 años, fue hallado sin vida en su residencia de Phoenix el mismo día que debía comparecer en un tribunal de Arizona por la muerte de su pequeña hija Parker, de dos años.
El suceso causó gran conmoción en la población de Marana y reavivó la discusión sobre los peligros del calor extremo para los infantes dentro de los vehículos.
¿De qué forma se produjo el olvido y el descubrimiento de la niña?
Conforme a los documentos judiciales, el 9 de julio de 2024, Scholtes dejó a la infante durmiendo en el asiento trasero de su vehículo, aparcado frente a su casa.
Alegó a la policía que no deseaba despertarla y que el aire acondicionado estaba funcionando. Sin embargo, Parker estuvo más de tres horas encerrada, mientras la temperatura exterior alcanzaba los 42 grados Celsius.
Durante ese lapso, el sujeto permaneció en su hogar. De acuerdo con USA TODAY y Paris Match, consumió cerveza, observó material para adultos y se dedicó a jugar videojuegos.
Los monitores de seguridad también lo captaron adquiriendo bebidas en un comercio cercano. Cuando la madre, Erika Scholtes, regresó al domicilio, encontró a la pequeña inconsciente. Fue llevada a un hospital, donde pereció poco después.
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En la indagatoria, salieron a la luz mensajes de texto entre la pareja que demostraban el efecto inmediato de la tragedia. Erika le expuso a su esposo:
“Te advertí de no dejar a las niñas en el automóvil. ¿Cuántas veces te lo he repetido?”
“No puedo asimilar lo que hice. Acabé con nuestra bebé. Esto no puede ser cierto.”
Las autoridades determinaron que no era la primera ocasión que Scholtes dejaba a sus hijas dentro del coche. Una de las hermanas mayores testificó que su progenitor repetía esta acción, a pesar de las prevenciones de su progenitora.
En octubre de 2025, el señor se declaró culpable de homicidio involuntario en segundo grado y maltrato infantil deliberado. Se enfrentaba a una pena de entre 20 y 30 años de cárcel sin opción a libertad temprana.
El 5 de noviembre de 2025, fecha en que debía presentarse ante la justicia para ser puesto bajo reclusión, fue encontrado sin vida en su vivienda.
La fiscal del distrito de Pima, Laura Conover, calificó el caso como “una circunstancia increíblemente penosa” y extendió sus condolencias a la familia.
La muerte de Parker volvió a poner de relieve una problemática recurrente en Estados Unidos: los niños que perecen tras permanecer en automóviles que alcanzan temperaturas elevadas.
De acuerdo con la entidad Kids and Car Safety, al menos 30 menores han fallecido este año por sucesos análogos. Los expertos sugieren revisar siempre los asientos posteriores antes de dejar el vehículo y dejar objetos personales cerca de la silla infantil como recordatorio.
Los funcionarios estatales enfatizan que, incluso con las ventanas parcialmente abiertas, la temperatura interna de un coche puede superar los 50 °C en breves instantes.
Por ello, recalcan que jamás se debe abandonar a un menor solo, ni siquiera por un momento. Organismos de protección infantil promueven también la utilización de sistemas de aviso y campañas de sensibilización comunitaria, recordando que la prevención es vital para evitar catástrofes como la de Parker.
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