Luis Ortiz regresó al tribunal y se le impuso vigilancia GPS; su nueva comparecencia será en diciembre y mantiene su declaración de no culpabilidad

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El letrado de Ortiz, Chris Georgalis, ha desmentido las acusaciones, aduciendo que las transferencias entre su representado y las personas de la República Dominicana nombradas en el pliego de cargos se debían a gestiones lícitas.
El pitcher quisqueyano Luis Ortiz, de los Guardianes de Cleveland, compareció de nuevo este miércoles ante el tribunal federal de Brooklyn luego de su detención inicial el domingo en el Aeropuerto Internacional Logan de Boston. Vestido con una chamarra de cuero oscura y pantalones de mezclilla, se declaró no culpable de haber aceptado gratificaciones para favorecer a apostadores con el resultado de sus lanzamientos. Su colega en el equipo, el cerrador de los Guardianes, Emmanuel Clase, también figura entre los implicados en el supuesto entramado.
Ortiz contestó de forma concisa a las preguntas del magistrado en la sala y no emitió comentarios a los periodistas que esperaban declaraciones al retirarse del recinto junto a su cónyuge y su asesor legal.
La fiscalía mantiene que Ortiz pactó previamente con los apostadores arrojar bolas en lugar de *strikes* a cambio de dádivas y ganancias ilícitas.
Chris Georgalis, defensor de Ortiz, ha refutado los cargos, sosteniendo que las remesas entre su cliente y los individuos de la República Dominicana mencionados en la acusación correspondían a operaciones legales.
Los fiscales indican que Clase, quien atraviesa su cuarta temporada de un acuerdo a cinco años por 20 millones de dólares, convenció a Ortiz para que se uniera al plan. Expresan que el actual poseedor del récord de salvamentos de los Guardianes empezó a suministrar datos sobre sus lanzamientos a los apostadores en 2023, si bien no solicitó pagos sino hasta este año.
De acuerdo con la acusación, Ortiz, quien este año obtuvo una remuneración de 782.600 dólares, alteró lanzamientos en encuentros frente a los Marineros de Seattle y los Cardenales de San Luis este verano.
Tanto Ortiz como Clase, ambos originarios de la República Dominicana, se hallan suspendidos con goce de sueldo sin medidas disciplinarias desde julio, fecha en que la MLB inició una indagatoria sobre lo que calificó como una actividad de apuestas anormalmente alta durante los juegos en los que ellos participaron.